Repsol ganó 1.792 millones hasta septiembre, un 36% menos
El consejero delegado de la petrolera, Josu Jon Imaz, celebra el acuerdo parlamentario para no consolidar el impuesto a las energéticas
El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, mostró este jueves su satisfacción por el acuerdo del PSOE con Junts y PNV para no prorrogar el impuesto extraordinario a las energéticas, que caduca a final de este año. En una conferencia con analistas con motivo de la publicación de resultados hasta septiembre de la petrolera, Imaz afirmó que el acuerdo anunciado en la noche del miércoles en la Cámara Baja son “noticias positivas” para su empresa, que recurrió el gravamen ante la Audiencia Nacional el año pasado junto a otras energéticas del sector.
Repsol y otras petroleras, como Cepsa, habían amenazado al Gobierno con paralizar sus inversiones en negocios verde, si consolidaba un impuesto que era temporal, Imaz da el problema por “finalizado” y cree que ahora es el momento de enfocarse en la ejecución del plan estratégico y seguir adelante con los planes de inversión que habían quedado en stand by en algunos frentes, entre ellos, en la refinería de Tarragona, por el impacto negativo que auguraban con este impuesto para los próximos ejercicios. Repsol ha pagado este año por el tributo 335 millones frente a los 443 millones del año pasado
Repsol obtuvo un resultado neto de 1.792 millones de euros en los nueve primeros meses de este año, lo que supone un descenso del 36% respecto al mismo periodo del año pasado, según informa la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El resultado ajustado (que mide específicamente el comportamiento de los negocios) se ha situado en 2.684 millones de euros, un 30% menos, en un contexto de volatilidad, de bajos precios del crudo y del gas y menores márgenes de refino, señala Repsol. A su vez, el ebitda de enero a septiembre también cayó, hasta un 22,6% y los 5.565 millones de euros. En el tercer trimestre, el resultado neto fue de 166 millones de euros, un 75% inferior al del trimestre anterior y 88% por debajo del tercer trimestre de 2023, en que ganó 1.199 millones.
Los resultados se han visto afectados por la volatilidad del crudo Brent que, en cualquier caso, registróuna media de 82,8 dólares por barril. Por el contrario, la cotización media del gas Henry Hub cayó un 22%, hasta los 2,1 dólares por MBtu (unidad de medida en el gas), y los precios de la electricidad en España fueron un 43 % inferiores a los del año pasado.
La deuda neta del grupo a fin de septiembre se situaba en los 5.532 millones de euros, 937 millones de euros más que en junio, debido principalmente a las inversiones, el dividendo en caja de julio, la adquisición de acciones propias dentro de los programas de recompra de acciones y al segundo pago del gravamen temporal a las energéticas en España. Así, el ratio de apalancamiento de la energética a cierre del tercer trimestre se situó en 16,4%, frente al 13,8% respecto al segundo trimestre. La liquidez se situaba en los 9.528 millones de euros, incluyendo las líneas de crédito comprometidas no dispuestas, lo que supone 3,10 veces los vencimientos de deuda bruta a corto plazo, frente a las 3,09 veces al cierre del segundo trimestre de 2024.
Con estos resultados, la compañía ha anunciado que acelera en su política de retribución a los accionistas con la distribución de un dividendo en efectivo de 0,475 euros brutos por acción en enero de 2025, frente a los 0,4 euros brutos por título del año anterior. Este año la compañía ha abonado 0,9 euros brutos por acción en efectivo, lo que representa un alza aproximada del 30% respecto a 2023. Repsol prevé alcanzar un rango de retribución a los accionistas de entre el 25% y el 35% del flujo de caja operativo del periodo del plan estratégico 2024-2027. Las acciones subían un 1,3% en la apertura del mercado tras conocerse estas cifras.
La compañía que dirige Josu Jon Imaz ha puesto en operación 897 MW de generación solar y eólica en los últimos 12 meses, principalmente en España y Estados Unidos, lo que ha contribuido a que la producción eléctrica con energías renovables casi se duplique en el tercer trimestre frente al año anterior, hasta alcanzar los 1.587 GWh. Repsol tiene una capacidad instalada de 2.464 MW, un 57% más en un año y tiene una cartera de proyectos de 60.000 MW en varias fases de desarrollo, de los que 2.870 MW se encuentran ya en construcción.
En la producción y desarrollo de proyectos de petróleo y gas destaca la actividad en aguas mexicanas del Golfo de México. En julio Repsol y su socio Eni realizaron un importante descubrimiento en el pozo Yopaat-1, en el Bloque 9. En agosto, Repsol incrementó su participación en el bloque 29, adyacente al descubrimiento en Yopaat-1, y donde ya desarrolla los hallazgos de Polok y Chinwol. Las inversiones en exploración y producción alcanzaron los 1.800 millones de euros.
La compañía tiene como objetivo aumentar de la producción de combustibles renovables y la movilidad compatible con los actuales vehículos de motor de combustión y que no requiere de inversiones adicionales en infraestructuras. En la planta de combustibles 100% renovables de Cartagena, donde ha invertido 250 millones de euros y tiene una capacidad de 250.000 toneladas al año, utiliza aceite de cocina usado para producir estos combustibles, tanto para vehículos de carretera como para la aviación. A esta planta se sumará una segunda que se ubicará en Puertollano.
Repsol ya suministra en más de 580 estaciones de servicio en España y Portugal el Diésel Nexa 100% Renovable, un combustible premium de origen orgánico que contribuye a la descarbonización del sector del transporte. Durante el ejercicio ya se han vendido más de 33 millones de litros de este combustible.
El objetivo del grupo es alcanzar los 600 puntos de venta a final de este año y 1.500 en 2025. Los combustibles renovables se están comercializando también en el transporte aéreo, un sector que tiene la obligación de incorporar un porcentaje creciente de combustible sostenible de aviación (SAF, por sus siglas en inglés) a partir de 2025. Repsol ya ha firmado contratos de suministro de SAF con aerolíneas nacionales e internacionales.
Repsol indicó que el resultado neto incluye un impuesto sobre beneficios con un tipo efectivo global del 34%. Entre enero y septiembre, la actividad generó una contribución fiscal en España de más de 6.500 millones de euros, sobre un total de 9.462 millones de euros en el periodo.