Club Med paraliza el plan de expansión por España
La hotelera francesa, ahora propiedad de la china Fosun, prioriza el crecimiento en Francia y Grecia. Lanzará una ofensiva para captar clientes españoles para sus inmuebles en Europa.
El gigante de la hotelería Club Med, de origen francés y ahora en manos de la china Fosun, paraliza, por ahora, sus planes de expansión en España. Si en una entrevista realizada el pasado mes de abril para Cinco Días, Rabeea Ansari, directora general para Europa del Sur y Mercados Emergentes de Club Med, confirmaba que la compañía estaba inmersa en varias negociaciones para poder ampliar su presencia en España, que se limitaba a un hotel en Málaga (Magna Marbella), abierto desde 2022 tras 21 años sin activos en el mercado español, Daniela Marín, la responsable de Marketing de Club Med para España y Portugal, omitió ayer cualquier referencia a España en la presentación del plan de crecimiento de la cartera hotelera para los próximos años, lo que invita a pensar que ninguna de esas conversaciones ha salido adelante.
En el caso de Europa, Club Med, que ocupa el puesto 81 en el ranking mundial con 70 hoteles y 20.000 habitaciones y es la tercera hotelera por tamaño de Francia, solo por detrás de Accor y B&B, abrirá en el corto y medio plazo tres hoteles en los Alpes y otros dos vacacionales en Francia y Grecia. “Por ahora nuestro principal interés es que el cliente español conozca nuestra marca y que entienda mejor el concepto de nuestra compañía”, recalcó Marín. De esta manera, la hotelera centrará su estrategia comercial en captar clientes españoles para el resto de destinos en Europa. El foco del crecimiento de la cartera hotelera estará centrado en los próximos años en Asia, ya que tiene firmados ocho hoteles en China y otros cuatro en el sudeste asiático, mientras que las aperturas en Sudamérica se limitarán a cinco hoteles.
Ese frenazo en la expansión en España se produce pese a los buenos resultados alcanzados por el hotel Magna Marbella, que experimentó un crecimiento del 17% en los ingresos en el primer semestre de 2024 hasta los 2,4 millones de euros y un alza del 11% en las noches de hotel hasta las 8.407 estancias. “Magna Marbella se posicionó como el resort con más reservas en los trayectos de corta distancia”, recalcó Marín.
Varias son las claves que podrían explicar ese cambio de rumbo de Club Med en cuanto al mercado español. Por un lado, la carestía de los activos hoteleros, lo que habría servido para ralentizar o frustrar algunas negociaciones que estaban en marcha, y por otra parte las dificultades implícitas que acarrean este tipo de inversiones en destinos vacacionales. En primer lugar, Ansari reconocía que los hoteles debían ocupar superficies con muchos metros cuadrados. “Necesitamos mucho suelo para poder ofrecer la experiencia premium que planteamos en localizaciones exclusivas”. En Marbella cuenta con una superficie de 14 hectáreas, en la que tiene cabida el hotel de 373 habitaciones, cinco piscinas, dos restaurantes, tres bares temáticos, diez pistas de tenis o seis de padel.
Otra línea roja para Club Med es que se buscan destinos sin estacionalidad, no solo de verano, lo que limita las posibilidades de crecimiento, en el caso de España, a la Comunidad Valenciana, Cataluña o Costa del Sol, frente a otros destinos como Baleares, con temporadas de verano más cortas. Y el tercer requisito es que debe existir un aeropuerto cercano al destino. “Somos una marca internacional y queremos contar con viajeros de distintas nacionalidades que tengan un fácil acceso a nuestros resorts”, señaló.
La hotelera busca en España 400 empleados para sus resorts
Club Med ha puesto en marcha su campaña de reclutamiento de personal para cubrir 400 vacantes en sus resorts en Europa. La firma estará presente en la feria JobMadrid 2024, que se celebrará el próximo 30 de octubre en el Palacio de Cibeles en Madrid, y organizará una jornada propia de reclutamiento el día 29 de octubre en Madrid y a finales de noviembre, en una fecha sin determinar, en Marbella.
La compañía, al igual que el resto de hoteleras que operan en España, ha encadenado dos años consecutivos en los que han tenido que trabajar de forma intensiva en dos vertientes: por un lado, fidelizar a los trabajadores en plantilla ante la fuga masiva de trabajadores, sobre todo cocina y sala, hacia la hostelería en buca de mejores salarios y menos estacionalidad, y por otra parte, captar personal joven que se sintiera atraído por trabajar en el sector turísticos.
Por si fuera poco, el incremento del coste de la vivienda en Baleares, Canarias o Costa del Sol ha obligado a algunas compañías como Barceló, Meliá o Iberostar, a acompañar la oferta de trabajo con alojamiento gratuito ante las dificultades para cerrar plantillas en algunos destinos con los precios tensionados.