Criteria recaba más de 2.200 millones este año para financiar su impulso inversor
El holding firma un préstamo de 1.650 millones, que se suman a los 600 millones por la venta de sus últimas acciones en Cellnex
Criteria pone la proa hacia su nuevo futuro. El holding que pilota Isidro Fainé ha entrado en pleno furor inversor, con la entrada en Puig, ACS, Inmobiliaria Colonial y la toma del 10% en Telefónica, todo tras la entrada de Ángel Simón como consejero delegado. Para financiarlo, la empresa ha abrochado un plan financiero con el que, hasta la fecha. ha conseguido recabar más de 2.200 millones de euros, con una mezcla de deuda y la colocación de parte de su participación en Cellnex. A esto se le suma el uso de caja y otras pequeñas desinversiones.
Las cuentas de este impulso son 1.650 millones para pasar del 3,39% al 10% en Telefónica en apenas unos meses. A estos importes se le suman 983 millones dedicados a la adquisición del 9,3% de ACS y otros 425 millones a la salida a Bolsa de Puig. A mayores, ha aportado 325 millones a Inmobiliaria Colonial en efectivo, que se suman a otro tanto en activos. En total, el grupo ha dedicado unos 3.400 millones. También ronda una posible entrada en Talgo, de la mano de la compañía checa Skoda, en un posible entente que haga frente a la húngara Magyar Vagon. Más remota parece ahora la posibilidad de que se refuerce en Naturgy, como se planteó de la mano de la compañía emiratí Taqa.
Para financiar estas adquisiciones, este lunes ha comunicado la firma de un préstamo sindicado de 1.650 millones con más de una veintena de entidades financieras. Se trata de un préstamo puente de 1.150 millones, con vencimiento a dos años, y que puede refinanciar con emisiones de bonos en el futuro. Se completa con otro crédito a plazo de 500 millones, que expira en tres años, ampliable por uno más.
En este proceso, el grupo ha acometido la venta de alguna de sus participadas. Por el momento, solo ha comunicado su desinversión en Cellnex, donde ha pasado del 4,63% que tenía en 2020 a un 0,39%. La mayor parte de estas ventas se produjo con la colocación de un paquete del 2,63%, por el que percibió 612 millones, que se puede incrementar con otras desinversiones menores.
Estos 2.200 millones se complementan con el uso de caja, que a cierre de 2023 ascendía a los 500 millones de euros. Además, la firma ha acometido otras pequeñas operaciones, para alcanzar los 3.500 millones que necesita para afrontar la larga lista de inversiones. También se ha aprovechado de los ingresos percibidos de sus participadas en la primera mitad del año. En liza está también la posible desinversión en la compañía de parkings Saba, tras volver a negociar la fusión con la compañía belga Interparking.
Con el nuevo préstamo, Criteria eleva su deuda hasta el entorno de los 5.500 millones, desde los 2.900 millones que tenía a finales del año pasado. En su nuevo plan estratégico, que presentó el pasado mes de junio con la vista puesta en 2030, la compañía se fijó como objetivo contar con un pasivo neto del 10% del valor bruto de los activos, si bien el plan le da flexibilidad para incrementar este umbral hasta el 20%. Teniendo en cuenta que la compañía espera alcanzar una cartera de 40.000 millones, este nivel de deuda se situaría en los 4.000 millones, pudiéndose elevar hasta los 8.000 millones.
El holding financiero cuenta con una emisión en el mercado, por importe de 600 millones, que emitió en 2020 y vence en 2027. Paga un interés del 0,87%, dado que se colocó en un momento en el que los bancos centrales estaban desplegando una batería de políticas ultraexpansivas para paliar los efectos económicos de la Covid-19. Es plausible que, en las emisiones que prevé hacer en los próximos meses, deba abonar un interés superior. Además, la compañía cuenta con un bono privado que colocó el año pasado entre un selecto grupo de inversores, al 4,5% y en abril afrontó el vencimiento de otro títulos de deuda de 600 millones.
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