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Ana Botín: “Ningún país tiene previsto un impuesto sobre beneficios extraordinarios más allá de 2024”

La presidenta de Banco Santander afea la permanencia del gravamen y considera que “no ayuda a la economía”

Ana Botín Santander
Ana Botín, presidenta de Banco Santander, junto a Héctor Grisi, consejero delegado de la entidad, este miércoles durante la presentación de resultados de 2023.Pablo Monge

Banco Santander ha presentado este miércoles unos resultados históricos, rebasando por primera vez la barrera de los 10.000 millones en un ejercicio marcado en España por el nuevo impuesto extraordinario al sector, en principio temporal (por dos años) pero que se ha prorrogado uno más y con el compromiso de hacerlo permanente. “Ningún país del mundo tiene previsto un impuesto sobre beneficios extraordinarios más allá de 2024. Un impuesto a la banca no ayuda a la economía”, ha criticado Ana Botín, presidenta del grupo.

La propia presidenta, que se reunió la semana pasada con el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha incidido en que el banco no ha cambiado su postura. “No cambiamos de opinión sobre el impuesto. La mejor manera de recaudar más es crecer más y que las empresas ganen más. El gran reto para España y Europa es que crecemos poco”, ha zanjado. Banco Santander deberá abonar este año, por el segundo ejercicio de la tasa, 338,5 millones de euros, según calcula la entidad. En 2022, el pago fue de 224 millones.

Pese a este coste, los beneficios del grupo (y lo cosechado en España) se ha disparado gracias al giro de la política monetaria en Europa hasta llegar a los 11.076 millones de euros en el ejercicio pasado. Y para el año que viene, la entidad espera todavía más: “Si 2023 ha sido bueno, 2024 va a ser aún mejor. No va a ser fácil, porque prevemos que los riesgos se aceleren, pero el Santander lo hará aún mejor”, ha añadido Botín.

En concreto, según las estimaciones de rentabilidad y eficiencia, el grupo espera rebasar en este ejercicio incluso los 12.000 millones de euros. “No damos una previsión concreto, pero es lo que sale en función del ROTE [rentabilidad sobre el capital tangible] y la eficiencia”, ha reconocido la presidenta.

Sobre el avance del Santander, tanto Botín como Héctor Grisi, consejero delegado, han resaltado la ventaja de la escala global y local del banco. Y la diversificación geográfica, que les protege de distintos momentos del ciclo económico en cada región. “Los negocios globales nos ayudan a tener más estabilidad”, han incidido los primeros espadas de la entidad. De cara a este ejercicio, Brasil será una baza importante para el Santander. “En conjunto, va a crecer mucho más que este año. Y se puede ver ya en los números del cuarto trimestre”, ha avanzado Grisi.

Antes de la rueda de prensa, en la conferencia con analistas, la presidenta de la entidad ha hecho referencia a la idoneidad de la recompra de títulos propios como una parte de la retribución al inversor. “Seguimos creyendo que a estos precios la recompra de acciones es una de las formas más efectivas de generar valor para los accionistas. Desde 2021, hemos recomprado el 9% de nuestros títulos en circulación”, ha afirmado.

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