Nuevos problemas para Boeing: EE UU llama a revisión a 171 aviones tras el incidente de un 737 MAX
La decisión llega después de un imprevisto que obligó a realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Portland (Oregon) tras desprenderse una parte del fuselaje en pleno vuelo
La Agencia Federal de la Aviación Estadounidense (FAA por sus siglas en inglés) ordenó este sábado la “inmovilización temporal” de determinados Boeing 737 MAX 9 operados por aerolíneas estadounidenses o en territorio estadounidense tras el incidente con una aeronave que perdió parte de su fuselaje en pleno vuelo y que tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Portland en el estado de Oregon. El informe de la FAA afirma que el avión regresó después de que su tripulación informara de un problema de presurización. La FAA y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte afirmaron a la prensa norteamericana que están investigando el acontecimiento.
A través de un comunicado, el organismo regulador informó de la entrada en vigor de una nueva directiva de aeronavegabilidad de emergencia que requerirá que los operadores inspeccionen las aeronaves antes de realizar nuevos vuelos. “Las inspecciones requeridas durarán entre cuatro y ocho horas por avión”, apuntó la agencia federal, que estimó en 171 los aviones afectados en todo el mundo. La decisión llegó pocas horas después de que la aerolínea estadounidense Alaska Airlines decidiera suspender de forma temporal al menos 65 aviones Boeing 737 MAX. En un comunicado, Boeing se mostró de acuerdo con la decisión de la FAA, mientras que United Airlines, una de las mayores aerolíneas estadounidenses, confirmó que la paralización de varios aviones provocó la cancelación de 60 vuelos.
Dos accidentes del 737 MAX paralizaron la aviación global entre 2018 y 2019, al dejar en tierra aviones en todo el mundo por casi dos años. Ambos hechos se cobraron 346 vidas y encendieron las alarmas de los reguladores de todo el mundo. Sin embargo, ambas catastrofes involucraron una variante más pequeña del modelo fabricado por Boeing, el MAX-8.
“Cada avión volverá a estar en servicio solo después de completar el mantenimiento completo y las inspecciones de seguridad”, comentó el director ejecutivo de Alaska, Ben Minicucci, según recoge el periódico estadounidense Wall Street Journal, quien describió la medida como “una medida de preucaución”. Por su parte, Boeing dijo que está al tanto del incidente y está recopilando información. “Un equipo técnico de Boeing está listo para apoyar la investigación”, dijo la compañía.
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