El TJUE fallará sobre la Superliga de fútbol el 21 de diciembre
La sentencia será definitiva y marcará el futuro del proyecto que lideran Real Madrid y FC Barcelona
Ya hay fecha para conocer la sentencia de la justicia europea que marcará el futuro de la Superliga. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha anunciado este martes que dará a conocer su fallo sobre la creación de una nueva competición a nivel europeo el próximo 21 de diciembre. La resolución será definitiva pues contra ella no cabe recurso.
La sentencia será el último paso para ver si los equipos promotores de la Superliga, entre los que se encuentra el Real Madrid y FC Barcelona, pueden seguir adelante con su proyecto. El pronunciamiento de los magistrados de la máxima instancia judicial europea llegará justo un año después de que el abogado general Athnasios Rantos emitiera su informe, preceptivo pero no vinculante, en el que avaló el veto de la FIFA y de la UEFA a la Superliga.
En abril de 2021, una docena de clubes europeos se unieron para crear la nueva competición, no obstante la amenaza de sanciones de los organismos reguladores del fútbol provocó que varios equipos abandonaran la iniciativa y solo quedaran al frente el Real Madrid, el Barça y la Juventus, aunque este último también decidió salir del proyecto el pasado mes de julio.
El TJUE estudia este caso a raíz de la cuestión prejudicial planteada por el juzgado de lo Mercantil número 17 de Madrid, que instruye la guerra judicial entre Superliga, UEFA y FIFA, paralizada por el momento, a la espera de la sentencia que se conocerá en dos meses.
Entre otras cosas, el juez español preguntó si es necesaria una autorización de los organismos rectores del fútbol europeo para que un tercer entre, en este caso la Superliga, promueva un nuevo torneo paneuropeo. Asimismo, consultó si el régimen sancionador que imponen las dos organizaciones es válido.
En opinión del abogado general Rantos, “la FIFA y la UEFA ostentan el monopolio de la autorización y la organización de competiciones internacionales de fútbol profesional en Europa”. Así indicó que las normas de la Unión Europea en materia de competencia no prohíben a los dos organismos, a sus federaciones miembro o a sus ligas nacionales “amenazar con sanciones a los clubes afiliados” si participan en el proyecto de creación de una nueva competición que “pudiera vulnerar los objetivos legítimos perseguidos por esas federaciones de las que son miembro”.
Pese a quedar solos en el proyecto, Real Madrid y Barcelona siguen defendiendo el proyecto de la Superliga. En el último año, han recurrido a la sociedad A22 Management, que actúa como agencia promotora de la competición, para dar a conocer más detalles de la misma y para rectificar algunos de los aspectos que ahuyentaron al panorama del fútbol europeo, como el hecho de ser una competición cerrada. La útima propuesta hablaba de un modelo de competición con hasta 80 participantes repartidos en varias divisiones, asegurando que el acceso a la misma será por méritos deportivos en coordinación con las ligas nacionales, y garantizando un mínimo de 14 partidos a cada equipo competidor, con el correspondiente aumento de los ingresos.
Por su parte, LaLiga estimó que perdería el 55% de sus ingresos con la Superliga. La guerra entre la patronal de los clubes españoles y Real Madrid y Barcelona al respecto de este proyecto tuvo ayer un nuevo capítulo. Una sentencia del juzgado de primera instancia número 63 de Madrid dio la razón a ambos equipos, que denunciaron la prohibición que les impuso la patronal para estar presentes en ytrd reuniones del órgano de LaLiga que gestiona la comercialización de los derechos audiovisuales, al considerar la patronal que suponía un conflicto de interés, al estar esos clubes promoviendo la Superliga. LaLiga anunció ayer que recurrirá.
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