Kutxabank se blinda para evitar la fuga de clientes con hipotecas variables
La entidad vasca mejora las condiciones para evitar la marcha a otras entidades dentro de la guerra de ofertas y contraofertas
Kutxabank blinda a los clientes de hipotecas variables para evitar fugas a otras entidades. La entidad vasca está ofreciendo ‘ad hoc’ mejoras en las condiciones de hipotecas a clientes que ya tenían contratado un préstamo a tipo variable ante las ofensivas de otros bancos por captar nuevos usuarios.
En ese sentido, ha realizado ofertas directas para mejorar sus condiciones, según detallan clientes de la entidad. Fuentes del banco explican que se trata de acciones puntuales dentro de la estrategia de defender su cartera. En ese sentido, detallan que siempre tienen que ver con contraofertas, una vez que los clientes han recibido una propuesta de otra entidad.
Las mismas fuentes aseguran que se trata de ofertas personalizadas con el objetivo de conservar los clientes más vinculados. También señalan que se trata de un reducido número de casos, ya que la mayor parte de la cartera de Kutxabank en los últimos años se ha formado a base de hipotecas a tipo fijo, por lo que esos clientes no se han visto perjudicados por las subidas de tipos de interés y resultan más difíciles de tentar por otras entidades.
Más allá de que lanzar contraofertas para retener a los clientes es una práctica habitual en el sector, estos movimientos revelan una guerra entre entidades por el cliente de hipotecas variables. Fuentes del sector explican que debido a la menor producción de nuevos préstamos hipotecarios, las entidades han comenzado a lanzar ofertas a clientes de otros bancos, algunas de forma agresiva, y que mejoran sus contratos.
El objetivo final es engrosar la cartera hipotecaria pese a la ralentización del mercado. Y los clientes también juegan sus bazas para obtener unas condiciones más favorables.
Con la continua y acelerada escalada del euríbor aupado por las alzas de tipos acometidas por el Banco Central Europeo (BCE) en el último año, las cuotas de las hipotecas variables se han encarecido y el cambio de condiciones ha sido una práctica habitual entre los clientes bancarios. El giro en el comportamiento de los clientes comenzó en la parte final de 2022.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en el primer semestre de este año se realizaron 231.412 cancelaciones registrales de préstamos para compra de vivienda, lo que supone un 26% más que en el semestre precedente.
Aunque una parte importante de las cancelaciones se deben a la amortización anticipada de hipotecas, que se han disparado en la primera mitad del año, otra parte importante responde al cambio de condiciones de los contratos. Los propios bancos vienen explicando que cuando los clientes tienen problemas para hacer frente al aumento de las cuotas, buscan soluciones ‘ad hoc’ para que el cliente pueda seguir pagando.
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