La banca contiene la morosidad en el 3,5% pese a las advertencias del BCE
La morosidad bancaria aumenta hasta el 2,49% desde el 2,38% registrado en marzo
La banca contiene la morosidad pese a las advertencias del Banco Central Europeo (BCE) para que cuiden su capital. Según los datos publicados este lunes por el Banco de España, la tasa de mora del sector financiero se situó el pasado mes de julio en el 3,5%, el mismo porcentaje que en el mes anterior, y por debajo del 3,59% de mayo. Se trata, igualmente, de niveles mínimos desde 2008.
Con respecto a julio de 2022, la morosidad del sector financiero bajó en 0,35 puntos (entonces se situaba en el 3,85%). El cómputo total de los créditos considerados dudosos (los que cuentan con al menos tres cuotas consecutivas sin pagar) se situó en 41.774 millones en el séptimo mes del año, un 0,9% menos que en junio. En comparativa anual, los dudosos se redujeron un 11,9% (5.661 millones).
Por tipo de entidades, en los bancos, cajas de ahorros y cooperativas de crédito la morosidad fue del 3,39%. Este registro es igual al del mes anterior y se sitúa por debajo del 3,77% de julio de 2022. Los dudosos de estas entidades bajaron en 401 millones respecto al mes anterior y se redujeron igualmente respecto a hace un año en 5.727 millones. En total, las entidades de crédito tenían 38.733 millones dudosos en el séptimo mes del año.
En el caso de los establecimientos financieros, la morosidad volvió a subir desde el 6,33% de junio al 6,43% de julio. En cambio, la cifra de dudosos en este tipo de entidades subió ligeramente en dos millones y dejó el total en 2.861 millones. Respecto a hace un año, la cuantía también es superior, dado que en julio de 2022 fue de 2.728 millones.
Por otro lado, la morosidad de los créditos concedidos para la compra o rehabilitación de una vivienda subió al 2,49% al cierre de la primera mitad de este año, desde el 2,38% de finales de marzo. Según los datos publicados el Banco de España (en este caso son trimestrales) la morosidad hipotecaria ha ido aumentando a lo largo del año, ya que pasó del 2,37% de finales de 2022 al 2,38% de marzo y ahora al 2,49%, previsiblemente impactada por las subidas de tipos que han encarecido las cuotas de los préstamos variables.
En un contexto de elevada inflación, la morosidad específica del crédito bancario para el consumo pasó del 4,35% de finales de marzo al 4,38% de junio. En el caso de la morosidad de los créditos concedidos al sector promotor e inmobiliario subió en el segundo trimestre del año y se situó en el 3,45% al cierre de junio, frente al 3,44% de marzo.
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