Los accionistas de Naturgy proponen como consejero delegado a un ejecutivo de Citi
Los accionistas de la energética abren el proceso para restaurar la figura de CEO, con Ignacio Gutiérrez-Orrantia como principal candidato
Hasta cinco veces se ha reunido en los dos últimos meses la Comisión de Nombramientos, Retribuciones y Gobierno Corporativo del consejo de administración de Naturgy. Objetivo: tratar sobre la restauración de la figura de consejero delegado (CEO), que desapareció tras el nombramiento de Francisco Reynés como presidente con todos los poderes en febrero de 2018, cuando sustituyó a Isidro Fainé en dicho cargo y a Rafael Villaseca, hasta entonces CEO, en sus funciones ejecutivas en la aún denominada Gas Natural Fenosa.
Se trata de una reiterada petición de los principales fondos de inversión accionistas de la compañía (CVC, con un 20,7% del capital; GIP, con un 20,6% e IFM, con un 13,9%), cuya situación está “empantanada”, según la califican fuentes del sector, tras la paralización (temporal, insisten en la compañía) del proyecto Géminis de segregación del grupo en dos sociedades (una con los negocios regulados y la otra con los liberalizados) lanzada al mercado en febrero de 2022, en vísperas de la invasión rusa de Ucrania.
Según fuentes conocedoras del proceso, los fondos habrían propuesto como principal candidato para ejercer las labores ejecutivas del grupo energético a Ignacio Gutiérrez-Orrantia, máximo responsable desde 2021 de la banca de inversión de Citigroup para Europa, Oriente Próximo y África. Asimismo, añaden, en la lista figurarían alguno más, incluso de las propias filas de Naturgy.
El primer accionista, Criteria Caixa, con una participación del 26,7%, se ha mostrado de acuerdo con la propuesta pues el desdoblamiento de funciones siempre “ha estado en el espíritu del gobierno corporativo”, indican fuentes empresariales. En la compañía han declinado hacer cualquier comentario sobre una cuestión que compete a los accionistas.
Las mismas fuentes aseguran que Reynés se habría resistido a ceder poder Naturgy. En su favor, hay que subrayar la decisión de la última junta general, celebrada el pasado mes de marzo, de reelegirle en la presidencia por otros cuatro años. Además, dado que en el consejo de Naturgy se sientan los cuatro principales accionistas, con un 80% del capital, hay quien considera que estos tienen un control directo y evidente sobre el presidente, cuyas decisiones se supervisan periódicamente.
Sea como fuere, la propuesta de Gutiérrez-Orrantia implica la opción de los accionistas por un perfil más financiero para Naturgy. El directivo se incorporó a Citi en 2004 donde ha desempeñado distintos cargos, tanto en España y Portugal, como en el resto de Europa, previo paso por las filiales de Merrill Lynch y Goldman Sachs en Londres. Hasta ser nombrado para su actual cargo en 2018, era el máximo responsable de Banca, Mercados de Capitales y Asesoría (BCMA) para la Península Ibérica, la región nórdica y Suiza. También era el presidente de banca de inversión para Europa Continental.
Una vez que el proceso para la designación de un CEO se ha abierto, este podría cerrarse en el corto o medio plazo. Algunas fuentes apuntan a la reunión del consejo de administración ordinario de julio.
Situación excepcional
El de Naturgy se ha convertido en un caso excepcional entre las empresas del Ibex que aplican el modelo anglosajón de mantener separadas las funciones directivas. Hasta el propio presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, que se venía resistiendo desde hace años a nombrar un consejero delegado, lo hizo el pasado mes de octubre, con la designación de Armando Martínez, si bien, Galán mantiene buena parte de sus poderes en la compañía.
También en 2014, el consejo de Repsol creó la figura de CEO, con la designación de Josu Jon Imaz, con la particularidad de que su presidente, Antonio Brufau, cedió parte de su sueldo en favor del nuevo ejecutivo. Francisco Reynés percibió 5,8 millones de retribución el año pasado.
La Comisión de Retribuciones y Nombramientos de Naturgy, que dirime el proceso, la integran los consejeros independientes Francisco Belil, Pedro Sáinz de Baranda Riva y Claudio Santiago Ponsa, así como los dominicales Rajaram Rao, en representación de GIP; Enrique Alcántara, por Criteria Caixa y Javier de Jaime, por CVC, además del secretario del consejo, Manuel García Cobaleda.
Una salida para los fondos
El 10 de febrero de 2022 Naturgy aprobaba una operación de segregación de sus negocios en dos sociedades (una que aglutinaría los activos regulados de luz y gas y otra, los liberalizados), denominado Proyecto Géminis. Aunque se anunció que una junta extraordinaria aprobase dicho spin-off en el otoño, la crisis económica y de los mercados desencadenada por la guerra de Ucrania dio al traste con un plan que, en cualquier caso, la empresa nunca ha dado oficialmente por muerto.
Poco después, en la junta de marzo de 2022, se oficializó la entrada en el consejo de la energética del fondo australiano IFM, que tras una opa parcial y compras directas, había alcanzado un 12% del capital de Naturgy (actualmente, un 13,9%). Se conformaba así un accionariado con tres fondos (GIP que entró en 2016 y CVC, en 2018) con una participación, que, sumada a la del accionista histórico, Criteria Caixa, suman el 80% del capital.
Rumores insistentes apuntan a un cierto mar de fondo en el consejo, dada la situación en la que se encuentran GIP y CVC, inversores de medio plazo con dificultades para colocar su participación, dado que son paquetes elevados, de algo más del 20%, respectivamente. La operación diseñada hace un año y medio podría haber facilitado la situación.
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