Real Madrid y Barcelona: dos maneras diferentes de encarar la post pandemia
El club blanco llega con menor deuda y mayor tesorería tras evitar pérdidas en todo el Covid-19 El Barça seguirá dependiendo de la venta de activos
Real Madrid y FC Barcelona se ven las caras este domingo en el Santiago Bernabéu, con una igualdad máxima en la clasificación, pero con diferencias en lo anímico, tras los últimos resultados en la Liga de Campeones, y también en el apartado financiero.
Los dos equipos más grandes de España viven el inicio de la temporada en la que se espera la recuperación total del negocio con realidades distintas en sus balances. El Real Madrid, con la tranquilidad que le da no haber incurrido en pérdidas en ninguno de los tres ejercicios afectados por la crisis del Covid-19; y el Barcelona intentando encarrilar una complicada situación patrimonial.
El equipo blanco cerró la pasada temporada con mayores ingresos de explotación, mejor rentabiidad operativa, y una posición más holgada a nivel de tesorería y deuda.
En facturación, el club que preside Florentino Pérez registró 721,5 millones de euros, por los 628 millones de los culés. Ambos siguen por debajo de las cifras previas al Covid. Más los azulgrana, que llegaron a ingresar 836,7 millones en la temporada 2018-2019.
Ambos proyectaron superar los 800 millones de euros en la 2019-2020, pero la pandemia truncó esos planes, y tampoco llegarán a ese nivel este año. El Real Madrid presupuesta 769 millones, al persistir "algunos efectos en ingresos por impacto diferido de la crisis económica derivada de la pandemia", y al continuar las obras en su estadio, con un aforo reducido y sin poder explotar las áreas vip.
El FC Barcelona presupuestaba 773 millones, con crecimientos en estadio e ingresos comerciales. Sin embargo, esa cifra contemplaba que el primer equipo llegara a cuartos de final de la Champions, pero tras los últimos resultados, está a punto de ser eliminado en la fase de grupos. Algo que provocará un socavón cercano a los 40 millones, solo por los ingresos que deja de percibir por pasar de ronda y lo que le corresponderá por el reparto audiovisual, y sin tener en cuenta taquillas o primas de los patrocinadores.
Ambos clubes llegan con diferencias en su rentabilidad operativa. El Real Madrid, con un ebitda de 200 millones en el último año, 10 veces más que su rival, resultado alterado por la venta a Sixth Street y Legends de la explotación del Bernabéu por 360 millones. Los dos presupuestan un resultado neto positivo para esta temporada. El club blanco, de solo un millón por los menores ingresos extraordinarios esperados, y el azulgrana, de 274,4 millones tras vender activos por 400 millones en lo que va de ejercicio.
Sin estas operaciones, la entidad que preside Joan Laporta tendría un resultado de explotación negativo, y desde su junta directiva ya se ha reconocido que su negocio no será rentable por sí solo hasta 2024. Su losa son los gastos de personal, que este año crecen un 28% hasta rozar los 587 millones, el 76% de su facturación presupuestada.
El Real Madrid también gana en tesorería y liquidez disponible, con 773 millones de euros, por los casi 380 millones del Barcelona; así como en deuda neta. Esta ha crecido a 221 millones por la remodelación del Santiago Bernabéu, mientras que los azulgrana declaran una deuda neta de 608 millones de euros.
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