El eje Moscú-Pekín agrega presión a la crisis energética europea
El envío de petróleo ruso a China aumenta casi un 7% en el primer semestre, aunque el gigante asiático busca diversificar sus fuentes de energía
El presidente de China, Xi Jinping, y el de Rusia, Vladimir Putin, han mantenido este jueves un encuentro en Uzbekistán, frente a la atenta mirada distante de Washington y Bruselas. La falta de condena de Pekín a la invasión rusa a Ucrania y las crecientes compras chinas de petróleo y gas ruso son los principales motivos de preocupación. De acuerdo a datos de la agencia S&P, las importaciones de petróleo ruso al gigante asiático han aumentado un 6.4% solo en el primer semestre.
Además de mayores ventas, el Kremlin se ha visto beneficiado del apoyo político por parte de Pekín, que quedó plasmado ayer en la reunión entre los mandatarios de ambos países. “China está dispuesta a hace esfuerzos con Rusia para asumir su responsabilidad de grandes potencias, y tomar el papel de guía para inyectar estabilidad y energía positiva en un mundo caótico”, ha dicho Xi luego del encuentro oficial. La referencia a la energía no parece casual.
La cooperación energética entre China y Rusia se ha acelerado en los primeros ocho meses del año. Además de las altas compras de petróleo, el envío de gas ruso a través de gasoducto ha aumentado un 60% en lo que va del año, según la petrolera estatal rusa Gazprom. S&P mantuvo la cautela al destacar que la capacidad de exportación desde Moscú a Pekín es limitada, a la vez que el gobierno chino busca evitar el error europeo y mantener la diversidad de proveedores energéticos.
Representantes del gigante ruso Gazprom han aprovechado las horas previas a la reunión para asegurar que el suministro de Moscú sigue siendo fundamental para Europa. “No hay país que sea capaz de suministrar recursos comparables”, ha disparado el director ejecutivo adjunto de la compañía pública, Oleg Aksyutin. Más tarde, funcionarios del Kremlin han precisado que las exportaciones de gas ruso este año a la UE caerían aproximadamente un 33%, en comparación con los envíos en 2021.
Los esfuerzos europeos por aislar y limitar la influencia rusa se ven contrapuestos por las mayores exportaciones no solo desde China, sino también desde India y Turquía. El suministro de petróleo ruso a India ha aumentado un 712% solo en agosto, según datos oficiales. También ha aumentado un 10% la llegada de gas desde Rusia hasta Turquía en lo que va del año.
El vaivén político global y la incertidumbre por los detalles técnicos de la propuesta energética presentada el miércoles por Bruselas ha llevado a que el precio del gas se mantenga extremadamente volátil. El valor del TTF, el costo del hidrocarburo en el mercado de Países Bajos, ha sufrido a comienzos de la jornada un aumento superior al 11% hasta alcanzar un valor de 242 euros el megavatio hora (MWh). Hacia el cierre de la jornada, la tendencia se revirtió y terminó con una caída de casi el 3%