Aramco y Geely negocian con Renault para hacerse con el 60% de su negocio de coches de combustión
El grupo francés pretende crear dos entidades separadas a mediados de 2023 La petrolera saudí se haría con el 20% del negocio de motores térmicos, mientras que la automovilística china pretende quedarse con un 40% del mismo, según Le Monde y Reuters
El fabricante de coches francés Renault está en conversaciones con la automovilística china Geely y con la petrolera saudí Aramco para venderles la mayor parte de su negocio de vehículos de combustión. Concretamente, según apuntan el medio francés Le Monde y la agencia Reuters, Aramco se haría con el 20% del negocio de motores térmicos y Geely se quedaría con el 40%. El 40% restante se mantendría en manos de Renault que, si bien seguiría siendo un accionista de peso, no tendría la mayoría accionarial.
La automovilística francesa ya había informado de su intención de dividir en dos entidades diferentes su negocio de combustión y de coches eléctricos para así contar con más capital con el que afrontar el reto de su electrificación, un proceso nada barato. Según indica Le Monde, Aramco (tiene un valor de más de 2,18 billones de euros), la empresa más valiosa del mundo junto a Apple, trabajaría junto a Renault en la fabricación de combustibles sintéticos y en productos para la era "pospetróleo".
Geely, por su parte, adquirió recientemente el 34% de la filial surcoreana de Renault. La automovilística china, a su vez, es propietario de la marca sueca Volvo, a través de la cual ha creado la firma 100% eléctrica Polestar.
En mayo, se dio a conocer que Renault había abierto un periodo de consultas con los representantes sindicales sobre los planes del grupo de crear dos entidades diferentes. Luca de Meo, consejero delegado del grupo francés, aseguró entonces que "todas las posibilidades están abiertas", incluida la hipótesis de que la rama eléctrica saliese a Bolsa. La compañía estima que la separación se efectuará a mediados de 2023.
El objetivo de Renault en Europa es solo vender vehículos eléctricos al final de la presente década, los cuales, de momento, se ensamblan principalmente en Francia. En España, la compañía aún no tiene planes para fabricar coches eléctricos hasta que no termine de asegurar el empleo a futuro de sus plantas francesas. A día de hoy, las factorías de Valladolid y Palencia solo ensamblan automóviles de combustión e híbridos.