Ana Botín: “Aspiramos a aumentar la remuneración al accionista por encima del 40%”
Anticipa que el banco mantendrá las recompras de acciones como parte de su política de remuneración al accionista en los próximos años
Las turbulencias financieras provocadas por la guerra de Ucrania no frenen las aspiraciones de Santander para este año. La presidenta del banco, Ana Botín, confirmó este viernes durante la junta general de accionistas de la entidad que mantiene intactos sus objetivos financieros y el reparto de dividendo para 2022.
De hecho, Botín adelantó que en los próximos ejercicios se mantendrá la combinación de recompra de acciones y el pago de un dividendo en efectivo como parte de la política de remuneración a los accionistas del banco. Además, apuntó que Santander confía elevar el dividendo por encima del 40% del pay out a partir de 2023. "Más allá de 2022, aspiramos a aumentar la remuneración al accionista por encima del 40% de nuestro beneficio ordinario, con alrededor de la mitad a través de recompras de acciones y con un dividendo en efectivo por acción creciente", explicó.
Igualmente, la presidenta de Santander ratificó sus metas para este ejercicio que ya anunció en febrero, entre ellas, obtener un crecimiento de los ingresos de alrededor del 5% (en euros constantes), una ratio de eficiencia del 45%, un retorno sobre el capital tangible (RoTE) ordinario por encima del 13% y una ratio de capital CET1 fully loaded del 12%. Botín también señaló que la entidad espera "mantener una alta rentabilidad en América y mejorar la rentabilidad en Europa".
Respecto a los resultados del primer trimestre, la presidenta de Santander aseguró que la actividad comercial "se ha mantenido fuerte, con ingresos en línea con el último trimestre y un crecimiento interanual de la nueva producción de créditos estimado en el 8%, a niveles prepandemia". Además, en el primer trimestre de 2022 la eficiencia y el coste del crédito "se mantuvieron en línea con lo previsto", el RoTE ordinario por encima del 13% y la ratio de capital CET1 fully loaded alcanzó el 12%.
Y es que, a pesar del estallido de la guerra por la invasión de Rusia a Ucrania, Botín detalló que el banco no tiene presencia en ninguno de los dos países y que su exposición crediticia directa es de apenas 80 millones de euros. No obstante, puntualizó que "no debemos minimizar el efecto indirecto que la invasión va a tener: una mayor inflación, un menor crecimiento económico, especialmente en Europa, e impactos que van más allá del fuerte aumento de los precios de la energía".
Reequilibrio de poderes
Entre los puntos del orden del día aprobados por la junta de Santander, destaca el reequilibrio de poderes entre Ana Botín y José Antonio Álvarez, de forma que el consejero delegado reportará directamente al consejo de administración, y no a la presidenta, como ha venido haciendo hasta ahora.
En la práctica, esta modificación pretender equilibrar más el poder en la entidad entre el consejero delegado y la presidenta y supone que Botín cede poder a Álvarez para situarse en niveles similares. Pese a estas alteraciones, la presidenta seguirá siendo ejecutiva, aunque con una nueva estructura y funciones. Se trata de una situación solicitada por el Banco Central Europeo (BCE), de manera que la entidad busca adelantarse a cumplir con el deseo del supervisor.
Por otro lado, los accionistas también validaron el reparto de un dividendo complementario en efectivo de 0,0515 euros por acción, que se pagará a partir del 2 de mayo. Junto con el primer dividendo, abonado en noviembre de 2021, el dividendo en efectivo total con cargo a de 2021 se sitúa en 0,1 euros por título. Incluidas las recompras de acciones, la retribución total será de 3.400 millones, lo que equivale a una rentabilidad por dividendo del 7%.
Los accionistas también dieron luz verde al nombramiento de Germán de la Fuente como consejero independiente, así como la reelección de los siguientes consejeros: José Antonio Álvarez (consejero delegado), Belén Romana y Henrique de Castro (consejeros externos independientes) y de Luis Isasi y Sergio Rial (son consejeros externos).
También aprobaron las cuentas anuales o la reelección de PwC como auditor de las cuentas del grupo. Todos los puntos del orden del día fueron aprobados con más de un 90% de los votos a favor, salvo el informe de remuneración de los consejeros, que obtuvo un apoyo del 88% y un 11,9% de votos en contra. De hecho, fue uno de los puntos más comentados por parte de sindicatos y minoritarios. En ese sentido, CC OO manifestó que le parecía "totalmente abusiva" ya que "algunos miembros del consejo reciben un salario de más de 200 veces la remuneración media de la plantilla de esta empresa".
Reducción de capital del 1,5%
Por otro lado, tras la aprobación de la junta, Santander ha ejecutado una reducción de capital de casi 130 millones de euros (un 1,5 % del total) mediante la amortización de cerca de 260 millones de acciones recompradas en el primer tramo de su programa de recompra con cargo a la 2021. Tras la reducción, el nuevo capital social de la compañía ha quedado fijado en 8.540 millones.
La finalidad de la reducción de capital es la amortización de las acciones propias, lo cual contribuye a mejorar la retribución del accionista mediante el incremento del beneficio por acción que se produce tras reducir el volumen de acciones circulantes.
Ayuda humanitaria en la guerra
La entidad ha tomado medidas para ayudar en la crisis humanitaria. Sobre esto, Botín señala: “Ahora es el momento de ayudar. Estoy especialmente orgullosa del corredor humanitario que hemos organizado para el traslado de refugiados desde Polonia hasta España en colaboración con el gobierno español, que ha permitido a 180 personas llegar con seguridad a España".
Además, Santander ha cedido la utilización del edificio del Solaruco, en la sede de Boadilla del Monte, para alojar temporalmente a niños ucranianos con cáncer y sus familias.