Bruselas libera 3.000 millones para financiar el PERTE del coche eléctrico
Maroto cree que es una oportunidad histórica para reforzar la industria de la automoción
Bruselas ha dado luz verde esta mañana al Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) ligado al vehículo eléctrico y conectado por un valor de 3.000 millones de euros. Se trata del primer PERTE presentado por el Gobierno de Pedro Sánchez que autoriza Bruselas y que será financiado parcialmente con los fondos Next Generation de la Unión Europea. “Este proyecto es una oportunidad histórica de convertir la fabricación del vehículo eléctrico y conectado en un proyecto tractor que refuerce la industria de automoción en todo el país. Para el Gobierno de España, el sector de automoción es prioritario y va a ser protagonista del Plan de Recuperación ya que contamos con las capacidades industriales y el liderazgo de las empresas para invertir en la movilidad del futuro, una movilidad que será más sostenible, digital, conectada y segura”, aseguró la ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto, nada más conocer la noticia.
Las previsiones que maneja Industria es que el proyecto podría generar hasta 140.000 puestos de trabajo y la contribución al PIB podría situarse entre un punto y 1,7 puntos. La activación de este plan provocaría que en 2023 se alcanzara la cifra de 250.000 vehículos eléctricos matriculados y entre 80.000 y 110.000 puntos de recarga. A las ayudas públicas, que deberán ser completadas con otra inyección de 1.300 millones de euros procedentes de los fondos europeos, le seguirán una inversión privada de 19.700 millones, según las estimaciones del Ejecutivo, lo que sumaría 24.000 millones de euros de aportación total. Esta inyección de fondos podría disparar el peso del sector de la automoció al 15% del PIB en 2030.
El PERTE repartirá ayudas dirigidas a proyectos de I+D+i, protección medioambiental y eficiencia energética para integrarlos en la cadena de valor de los vehículos eléctricos y conectados. En un comunicado, la Comisión Europea recalcó que el PERTE estará vigente hasta finales de 2023 y que estará abierto a la participación de consorcios de empresas tanto nacionales como internacionales. Los requisitos marcados por las autoridades comunitarias para los participantes se centran en que trabajen en actividades ligadas al coche eléctrico y que el 40% de los socios del consorcio sean pymes. Las ayudas se concederán a través de un proceso de selección competitivo y se concederán en forma de subvenciones directas y préstamos preferentes a tipos de interés reducidos.