Alemania quiere evitar que entren en vigor las nuevas políticas de privacidad de WhatsApp
Exige la aprobación expresa de los usuarios.
Parece que las nuevas políticas de privacidad que WhatsApp quiere que entren en vigor a partir del 15 de mayo van a traer más cola de la prevista. Si en un primer instante fueron los usuarios los que organizaron una especie de resistencia marchándose masivamente a otras apps de mensajería, ahora le toca el turno a algunas autoridades europeas que, al calor de la famosa RGPD, quieren que Facebook dé explicaciones de lo que pretende.
En esta ocasión, no ha sido un comisario del gobierno de la Unión Europea el que está detrás de lo ocurrido, sino el comisionado de Hamburgo para la Protección de Datos y la Libertad de Información en Alemania, Johannes Caspar, que cree que existen algunos problemas para que entren en vigor las nuevas políticas de privacidad de WhatsApp. Tanto es así, que está convencido de que "no son legales" desde la perspectiva de ese "Reglamento General de Protección de Datos".
Orden para detener la recopilación de datos
En ese escrito, se afirma que "las disposiciones sobre transferencia de datos se encuentran dispersas en diferentes niveles de la declaración de protección de datos" de WhatsApp, por lo que "son poco claras y difíciles de distinguir entre sus versiones europea e internacional". Por si fuera poco, creen que "su contenido es engañoso y existen considerables contradicciones. Incluso después de un análisis más detallado, no se puede ver qué consecuencias tiene el consentimiento para los usuarios".
Este escrito toca, además, un elemento que es determinante dentro del actual panorama de la privacidad y los datos de los usuarios: el consentimiento. El comisionado afirma rotundamente que "el consentimiento [a las nuevas políticas] no se da de forma voluntaria, ya que WhatsApp requiere el consentimiento a las nuevas disposiciones como condición para el uso continuado de las funcionalidades del servicio".
El resultado de ese escrito es la emisión por parte del comisionado de una "prohibición de emergencia" de tres meses en los que se prohíba a Facebook "continuar con la recopilación de datos", exigiendo a los reguladores de la Unión Europea un panel que extienda esta medida al resto de estados miembros. Algo que está por ver que ocurra en las próximas horas. Aun así, Facebook no parece dispuesta a cambiar sus planes y ha declarado que no detendrá la implementación de estos cambios por lo que entiende que la respuesta por parte de los reguladores alemanes está "basada en un malentendido fundamental".