OHL tiene el plácet del 75% de sus bonistas para lanzar la refinanciación de deuda
Resta el trámite de la aprobación de la homologación de deuda ante un tribunal de Londres
La dirección de OHL ha alcanzado esta mañana el acuerdo suficiente para incluir al 100% de su masa acreedora en bonos en la operación de reestructuración financiera que tiene en marcha. Si el pasado 21 de enero, el 57,3% de los bonistas respaldaba la operación, la cuota ha llegado al 75%, según fuentes del mercado, lo que permitiría la homologación de toda la deuda bajo el acuerdo.
OHL busca fusionar sus dos remesas de bonos, con vencimiento en 2022 (323 millones de euros) y 2023 (269,9 millones), respectivamente, en una nueva emisión en la que el 50% tendrá vencimiento en marzo de 2025 y la otra mitad en el mismo mes de 2026. Además de alargar el plazo de amortización, la compañía persigue una reducción de 105 millones respecto a los 593 millones de saldo vivo actual. Qudarse con un importe final de 488,3 millones se conseguirá a partir de una quita de 35 millones y la capitalización de otros 70 millones de euros.
El último paso previo al lanzamiento de la refinanciación es el de la solicitud de aprobación ante un tribunal de Londres, en lo que se conoce como procedimiento de Scheme of Arrangement. Este debería ser aprobado en una reunión en la que la mayoría, representanda por un 75% en valor entre los tenedores de bonos presentes, vote de forma favorable al pacto.
OHL mantiene abierto el plazo hasta las 17 horas de mañana viernes (hora de Londres) para que los bonistas acepten una quita del 12%, que quedaría reducida al 10% con la comisión que ofrece la empresa a quienes se adhieran a esta primera vía (dos céntimos de euros por cada euro de importe principal de los bonos de cada bonista, pagadera en nuevos bonos).
La previsión inicial es que un 61,7% de la masa (366 millones) tome este primer camino. Para el 38,25% restante (bonos por 226,8 millones) se prevé que casi un tercio de la deuda sea capitalizada (67,8 millones) y que el resto (158,2 millones) se integre en el nuevo bono. Para ello, OHL ha ofrecido una ampliación de capital a 0,74 euros por título.
Ampliaciones y nueva estructura
De forma paralela, OHL llevará a una junta extraordinaria en la segunda mitad de marzo la creación de tres Newcos en las que residirán las acciones de las principales filiales de la sociedad; OHL Industrial, Desarrollos, Servicios, Senda Infraestructuras o Construcción Internacional (salvo OHL USA). Se trata de poder utilizarlas como garantía del nuevo bono.
Una vez reconstruido el armazón financiero de la empresa, el paso adicional es el de fortalecer su balance con una doble ampliación de capital a 0,36 euros por título. El primer accionista, la familia Amodio, ha comprometido la invesión de 37 millones de euros, mientras que el fondo Tyrus, acreedor de Grupo Villar Mir (segundo accionista de OHL) acudirá con cinco millones de euros.
De suscribirse en su totalidad ambas ampliaciones, OHL doblará su capital, pasando de 286 millones acciones en circulación a 591 millones. La quita de deuda, sumada a la entrada de 42 a 71 millones por la ampliación de capital, supondría la incorporación de fondos propios por un máximo de 176 millones.
La conversión de bonos en capital supondrá que los bonistas más relevantes alcancen una posición de cerca del 17% en el accionariado. Entre los nuevos partícipes, Sandgrove se haría con alrededor del 11%, que sumaría a su actual 3,9%; Melqart contaría con un 3,5%, y Searchlight irrumpiría con un 2%.
Tres años de estabilidad
Estos nuevos accionistas no tendrán presencia en el consejo de administración y, según una cláusula pactada con OHL, se alinearán con las propuestas del consejo de administración en la junta de accionistas durante un periodo de tres años, prorrogable otros tres. En el peor de los casos podrían abstenerse, pero nunca votar en contra del consejo. Con ello, consejo y equipo gestor buscan un periodo de estabilidad para lanzar el renovado plan estratégico.
Los Amodio, por su parte, subirían del 16% actual a una horquilla del 26% al 29%. Tyrus, que es acreedor de Grupo Villar Mir (GVM) a través de un préstamo de 200 millones garantizado con las acciones de OHL, entra en la ampliación con el objetivo de que preservar el valor de la prenda. Entre el fondo y GVM, contarían con alrededor del 12% del grupo constructor.
Tal y como informó Cinco Días, el grupo constructor prevé regresar a terrenos de ganancias entre 2022 y 2023. Para ese último año espera dar un salto desde los 2.864 millones en ingresos con que va a cerrar 2020 hasta los 3.715 millones. El ebitda subiría de 68 millones a 155 millones.