Ford da tranquilidad a Almussafes con la adjudicación de un nuevo motor
La compañía también extiende la producción de la Transit Connect hasa 2024
Ford ha comunicado este martes a los sindicatos que la planta de motores de Almussafes (Valencia) producirá el motor 2.0 litros GDI, una variante adicional del Duratec que se monta en las Transit Connect que se exportan al mercado norteamericano, según han informado fuentes de la compañía.
El anuncio llega un año después de que la factoría valenciana recibiera la mala noticia de que dejaría de fabricar los motores Ecoboost de 2.0 y 2.3 litros. El fabricante estadounidense decidió que la nueva generación de estos propulsores se producirá en Norteamérica a partir de 2022.
Ford invertirá diez millones de dólares (8,55 millones de euros) para la fabricación de esta nueva versión del propulsor, que comparte la misma arquitectura que el 2.0 litros GTDI. Este último se produce actualmente en Valencia. El centro de motores emplea a unas 980 personas.
Sin embargo, según ha señalado UGT (sindicato mayoritario en la planta) a Efe, la adjudicación del propulsor "no es una solución definitiva para el futuro de la fábrica, pero es una buena noticia porque el aumento de la producción a partir de septiembre de 2021 dará estabilidad a la planta de motores y mantendrá la carga de trabajo al menos hasta finales de 2023".
Asimismo, la compañía también ha extendido la producción de la Transit Connect para Norteamérica hasta 2024 (iba a dejar de exportarla a partir del año que viene). La dirección de Ford Almussafes planteó a finales de agosto un nuevo Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) con 15 días de paro en la factoría de vehículos y otros 19 días en la planta de motores.
El objetivo de este expediente, el sexto desde verano de 2019 y que se firmó el 1 de septiembre, es ajustar la producción a la demanda real durante la última parte del año. La planta de vehículos parará 15 días entre septiembre y diciembre, de los que dos serán por completo y los otros trece afectarán al 40% de la plantilla, sobre todo a la vinculada a los modelos Mondeo- S-Max, Galaxy y Transit.
Respecto a la planta de montaje de motores, el parón sería de 19 días: seis en septiembre, el 13 de octubre, cinco días en noviembre y siete días en diciembre.
La empresa justificó su decisión en la necesidad de disminuir en 11.000 vehículos y 28.000 motores el volumen de producción previsto para la planta este año. El ERTE afectará a alrededor de 3.000 trabajadores al día: unos 900 en motores y 2.500 en vehículos durante la reducción parcial (hasta 5.200 los días de parada total). Ford complementará la prestación por desempleo hasta el 80% del salario real, incluidos los complementos, el 100% de las vacaciones, pagas extras, gratificación especial y antigüedad.
Empresa y sindicatos firmaron un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción a finales de mayo por la bajada de la producción en 100 coches diarios, pasando de 1.740 a 1.640 unidades, y que se planteó antes del estado de alarma. Desde julio, han salido 200 empleados de la planta de manera voluntaria y antes del 31 de octubre deberán hacerlo otros 150.