Six advierte de posibles caídas en BME si los inversores se quedan las acciones
La fecha límite para vender al precio de la opa de 32,98 euros por acción es el 5 de septiembre
Six, el grupo suizo que ha comprado BME, anunció este lunes que no ha conseguido rebasar la toma de control de más del 95% de las acciones de BME. Esto implica que, a partir del 5 de septiembre, Six no tendrá la obligación de comprar a los minoritarios al precio de la opa, 32,98 euros por acción, a menos que logre antes el mencionado porcentaje, que le permitirá ejercer su derecho de venta forzosa (squeeze out). Esto implicaría la exclusión de Bolsa de BME. Avisa además de que, una vez pasado el efecto de la prórroga de la opa, la acción de BME puede sufrir.
“Six no estará obligada a adquirir ninguna acción adicional de BME y las acciones de BME volverán a estar sujetas a las condiciones del mercado”, señala en una nota. En otras palabras, augura una caída de los títulos en cuanto deje de estar bajo la influencia de su oferta.
De acuerdo con un hecho relevante remitido a la CNMV, Six ha conseguido alcanzar, a fecha del 21 de agosto, el 94,294% del capital de BME. Aunque aún faltan unos días para la fecha tope, la firma suiza reconoce que no hay “previsión o certeza alguna” de que antes del 5 de septiembre se vaya a alcanzar el 95% del capital. Necesita el 0,706% para excluirla del mercado, como anunció el pasado 11 de junio.
En dos meses y medio, Six ha logrado atraer solo a dueños del 1,08474% del capital, cuando comenzó el proceso de sell out (compra forzosa), en el que los accionistas de BME que se han quedado pueden obligar a que el grupo suizo les compre al precio de la oferta. Como publicó CincoDías el pasado 13 de agosto, Six no ha logrado el porcentaje que precisa para excluir de Bolsa a la compañía que pilota Javier Hernani como consejero delegado. La opa de Six por BME, lanzada en noviembre del año pasado, fue un rotundo éxito. Pero la compañía helvética se había comprometido en el folleto de la operación a mantener cotizando BME si conseguía menos del 95% del capital más una acción. Y se quedó muy cerca, pero no lo logró.
Fuentes del mercado señalan que el grupo suizo no tiene el menor interés en mantener cotizada a BME. La propia Six no cotiza en Zurich y negociar su filial en España supondría tener que cumplir requisitos adicionales de transparencia.
Dividendos
La diferencia entre que los inversores ejerzan su derecho de sell out y que Six use el suyo de squeeze out está en que en el primer caso, es el accionista el que corre con los gastos de intermediación y en el segundo, la compañía que dirige Jos Dijsselhof, a su vez presidente no ejecutivo de la compañía que gestiona los mercados regulados españoles.
BME ha cancelado además el primer dividendo a cuenta de los resultados de 2020, previsto en principio para el próximo mes, con la coartada del Covid-19. Lo ha suprimido pese a que el beneficio ordinario, sin incluir los gastos que registró BME debido a la propia oferta de Six –principalmente en asesores, como Morgan Stanley y Latham & Watkins–, hubiera subido un 13% en el primer semestre.
Uno de los marchamos de BME desde su OPV en julio de 2006 ha sido su rumbosa política de remuneración a los accionistas. Les ha entregado año tras año alrededor del 95% de sus beneficios. Six, en todo caso, fue claro desde un principio, al avisar de que reduciría ese porcentaje hasta situarlo alrededor del 60%. Esta es la porción del resultado que la firma reparte a sus más de 120 bancos accionistas, con UBS y Credit Suisse, que controlan el 33,4% del capital en conjunto, a la cabeza.