Los milmillonarios españoles son un poco menos ricos que hace un año
En España, 29 personas acumulan una fortuna superior a los 1.000 millones de dólares
El número de milmillonarios –personas con un patrimonio total estimado de al menos 1.000 millones de dólares (905 millones de euros)– se mantuvo constante en España en 2018 en 29 personas. Todas ellas suman un total de 119.300 millones de dólares (108.021 millones de euros). Esta cifra supone la pérdida de 16.700 millones de dólares (15.121 millones de euros) respecto al patrimonio de las mayores fortunas españolas del año pasado, según el informe The billionaire effect, elaborado por UBS y PwC y presentado este viernes. Las cifras forman un cómputo total en base al patrimonio financiero, inmobiliario y empresarial de cada uno de los perfiles analizados.
El estudio no ofrece los nombres de quienes forman parte de este selecto club, pero las cifras coinciden con la clasificación que elabora anualmente Forbes. En el caso de España, el fundador de Inditex, Amancio Ortega, encabezaría la lista con una fortuna estimada de 56,9 mil millones de euros, seguido por su hija Sandra Ortega, que sumaría 5,5 mil millones. El director ejecutivo de Iberostar, Miquel Fluxà Rosselló, con 3,4 mil millones de euros, completa el podio, aunque a poca distancia del presidente ejecutivo de Ferrovial, Rafael del Pino Calvo-Sotelo, y el dueño de Mercadona, Juan Roig, con 3,3 mil millones de euros y 2,7 mil millones de euros, respectivamente.
En términos globales, en el mundo ya hay un total de 2.101 personas consideradas milmillonarias, 57 menos que en la pasada edición del informe, con una fortuna estimada conjunta de 7,7 billones de euros, lo que implica un retroceso del 4,3%, equivalente a 351.277 millones de euros, la primera pérdida de patrimonio desde 2015. “En 2018 la creación de riqueza se interrumpió al sufrir los mercados bursátiles mundiales su peor corrección desde la crisis financiera de 2008”, explican los autores del informe. “El auge de los milmillonarios de los últimos cinco años ha sufrido una corrección natural”, ha señalado Josef Stadler, director del área de grandes fortunas en UBS Global Wealth Management, para quien la caída responde a un dólar más fuerte, combinado con una mayor incertidumbre en los mercados de valores en medio de un entorno geopolítico difícil”.
Tal y como explica a este periódico Roberto Scholtes, director de estrategia de UBS en España, “cuando estos datos se recopilan venimos de una caída de las bolsas que oscila entre el 10% y el 15%, con un peor comportamiento relativo en ciertos países como España o China. Eso explica, en buena medida, que haya menos milmillonarios y que además muevan menos patrimonio que en el ejercicio anterior”.
Estados Unidos es el país con un mayor número de ricos, 749 personas, que suman un total de 2.822 mil millones de euros, mientras que China, con 395 de estos perfiles, que acumulan 891,3 mil millones de euros, se sitúa en segunda posición, por delante de Rusia, donde 98 ultrarricos reúnen 382 mil millones de euros. Un podio que se repite inalterable desde 2014, fecha en la que comenzó el registro.
A la hora de crear y perder riqueza, prosigue Scholtes, hay varias presiones y movimientos que empujan desde diferentes ángulos. “Hay una fuerza natural que explica la aparición de nuevos miembros, sobre todo en países como Estados Unidos, China o Corea del Sur. Se están desarrollando nuevas corporaciones tecnológicas que salen a Bolsa e inflan los bolsillos de sus fundadores y accionistas”, desarrolla. La tecnología fue significativamente el principal motor de crecimiento en 2018, frente al sector retail, que impulsó el desarrollo en 2017, seguido del tecnológico y el inmobiliario. En el caso concreto de España, el origen de la fortuna de los más ricos corresponde, sobre todo, al retail y la construcción.
Al otro lado, entre los efectos que menguan el saco de las grandes –grandísimas– fortunas, se encuentran los movimientos demográficos. “Hay mucha gente que fallece y que a la hora de repartir su herencia la divide entre diferentes personas”. También se da el caso, añade Scholtes, de que estos perfiles decidan donar su patrimonio a fundaciones o entidades privadas, haciendo que desaparezca el vínculo entre el dinero y una persona física. De hecho, aunque no son ancianos, la mayoría de los milmillonarios son perfiles veteranos, con una edad media que ronda los 64 años. En América Central, Sudamérica y Oceanía se encuentran las fortunas más longevas, con una media cercana a los 68 años. En el extremo opuesto, Europa del Este es el hogar de los más jóvenes, que oscilan en torno al medio siglo de edad.
Este último fenómeno, la división de la riqueza por fallecimiento, es el que tiene más peso en España, ya que “no somos un país de unicornios que vea nacer grandes empresas tecnológicas que convierten en milmillonarios a sus socios. La causa principal de creación de riqueza a nivel mundial, en España es anecdótica”. De hecho, según los datos del citado informe, menos de la mitad (48%) de los milmillonarios españoles crearon de la nada sus fortunas, una cifra muy similar a la del promedio europeo (47%), donde también reina esta tendencia. Los números chocan con el caso de los países punteros en nacimientos de grandes patrimonios. En Estados Unidos, los milmillonarios de fortunas no heredadas son un 70%, en Canadá llegan al 76%, en Reino Unido alcanzan el 83%, en Arabia Saudi escalan al 90% y en China y Rusia se colocan en un 98% y un 100% respectivamente. Por debajo de España se colocan países como Alemania (29%), Brasil (43%) o Suiza (45%).
Las mujeres milmillonarias representan solo el 11% del total, una cifra que asciende al 23% en España
Aunque la forma de gestionar las fortunas no redunda en un aumento del patrimonio, también se observan diferencias entre zonas como Estados Unidos y Europa, y por ende España. “La principal diferencia entre un lugar y otro, además del origen de la riqueza, es su gestión. Aquí aún no está establecida la filosofía estadounidense de trabajar en común y crear fundaciones conjuntas, como han hecho nombres como Bill Gates o Warren Buffet. Esas asociaciones entre ricos, esa filantropía, aquí aún no está desarrollada”.
Las mujeres son tan solo el 11% de estos individuos, aunque este porcentaje ha crecido un 46% en los últimos cinco años. Actualmente se estiman 233 mujeres mil millonarias, frente a las 160 que aparecían en 2013. En España, esta proporción ronda el 23%, algo superior a la media de Europa occidental, donde el desequilibrio se sitúa en el 18%. Oceanía, con un 19% de representación femenina, es la región más paritaria del mundo, en contraste con el sureste asiático y Europa del Este, donde esta relación cae al 5%.
El aumento de mujeres ultrarricas se debe en buena medida por la democratización de las nuevas tecnologías, tal y como desarrolla Scholtes. “En los últimos años, el número de millonarias se ha multiplicado por 6,6, mientras que el de hombres por 5,2. Es un fenómeno fuertemente marcado en Asia, donde ellas empiezan a tener más peso en el emprendimiento. Tradicionalmente, las mujeres han estado más alejadas de las tecnologías y la innovación, pero ahora, poco a poco, eso se va corrigiendo”, señala el experto, que también pone en valor las cifras de España en cuanto a brecha de género.