Volkswagen rechaza pactar en la macrodemanda por fraude de las emisiones
468.992 personas se sumaron a la denuncia colectiva. El juez indicó que “posiblemente, la demanda no será de utilidad” para los residentes en el extranjero
“El dieselgate es parte de nuestra historia. Hemos de asumir lo que ha pasado y hacernos cargo”. Así de categórico se mostró Jürgen Stackmann, miembro del comité ejecutivo de VW, en el pasado Salón del Automóvil de Frankfurt en septiembre. Este lunes, esa parte de la historia del grupo automovilístico tuvo su primera vista en la Audiencia de Brunswick (Alemania), para tratar una macrodemanda contra VW a la que se han sumado 468.992 usuarios. Estas personas compraron coches trucados por el fabricante para falsear sus emisiones de dióxido de nitrógeno (NOx). La automovilística ha rechazado la posibilidad de alcanzar un acuerdo extrajudicial para resolver el litigio que fue propuesto por un juzgado alemán.
La demanda, que está encabezada por la Asociación Alemana de Organizaciones de Consumidores (que fue presentada el pasado 1 de noviembre) busca, según ha señalado la Audiencia Territorial de Brunswick, “esclarecer cuestiones de hecho y de derecho, importantes para las reclamaciones de indemnización” de los usuarios, entre los que se cuentan también miles de afectados españoles. En el proceso no se analizarán casos individuales, sino alrededor de sesenta objetos de litigio, en los cuales la decisión tendrá “carácter vinculante para los usuarios que se han sumado a la demanda colectiva”.
El juez que preside la sala, Michael Neef, ha subrayado que “posiblemente, la demanda colectiva no será de utilidad para los usuarios con residencia en el extranjero” que se han sumado a la misma, ya que para estos afectados “habrá que aplicar, si procede, el derecho material extranjero” para responder a sus solicitudes de indemnización, informó Efe.
Si bien el fabricante alemán admitió haber usado un software que trucó las emisiones de NOx de 11 millones de coches de las marcas VW, Audi, Seat y Skoda con motores diésel, ha señalado que “los vehículos son conducidos por cientos de miles de clientes todos los días”, por lo que creen “que no hay daños y, por lo tanto, no hay motivo de queja”, según recogió Reuters.
La primera vista del juicio llega una semana después de que al consejero delegado del grupo Volkswagen, Herbert Diess, fuese denunciado por la fiscalía alemana de haber manipulado el mercado de valores, al no haber informado “sin dilación” a los inversores sobre los riesgos del dieselgate. Además de Diess, fueron imputados también Martin Winterkorn, expresidente de la compañía, y el director de la junta directiva de Volkswagen, Hans Dieter Pötsch.
Según la fiscalía, los tres imputados debían informar a los accionistas sobre el dieselgate, un escándalo que estalló en septiembre de 2015, y que, según el ministerio público alemán, Winterkon sabía del fraude en mayo de ese año, Pötsch un mes más tarde y Diess en julio de 2015.
El escándalo costó 29.000 millones al fabricante
El grupo automovilístico Volkswagen informó en su conferencia de prensa anual en marzo de este año, que tuvo que provisionar 3.200 millones de euros para gastos relacionados con sus litigios abiertos por el escándalo del dieselgate. En total, desde que se conociera el fraude en 2015 hasta la actualidad, la empresa ha perdido 29.000 millones de euros por este asunto. La compañía ya revisó y solucionó el problema del 99% de los coches afectados en Alemania por el fraude de las emisiones.