Amancio Ortega, 11.000 millones en ladrillo
El fundador de Inditex aprovecha los dividendos del grupo textil para invertir en el sector inmobiliario A través de Pontegadea, ya ha cerrado este año tres operaciones por 943 millones
El hombre más rico de España tiene bastante claro cómo y dónde invertir sus recursos. El gigantesco flujo de dinero que cada año le llega a Amancio Ortega gracias el grupo textil Inditex acaba en gran parte convertido en ladrillo. Oficinas, hoteles o tiendas en los edificios más emblemáticos de las mejores calles de las grandes urbes del mundo. Con la última adquisición de un inmueble en Washington, cerrada esta semana, su patrimonio inmobiliario se acerca a los 11.000 millones de euros.
El holding en el que Ortega agrupa su patrimonio se llama Pontegadea Inversiones. A su vez se divide en dos grandes negocios. Por un lado, actúa como su brazo inversor principal en Inditex, de la que el empresario controla un 59,2% del capital y lo que le otorga una fortuna de 50.840 millones en valor bursátil. A su vez, a través de la filial Pontegadea Inmobiliaria, ostenta un conjunto de sociedades en varios países desde las que adquiere y gestiona sus propiedades inmobiliarias.
Los beneficios que otorga Inditex al empresario gallego van en gran parte a adquisiciones inmobiliarias. Correspondiente a la ganancia de 2018, Ortega recibió 1.686 millones en dividendos, la mayor cuantía de la historia de la compañía, lo que le permite munición suficiente para afrontar más adquisiciones y de mayor tamaño. En lo que va de año, ha cerrado tres transacciones por 943 millones.
Si se suma esa cifra a la cartera declarada, de 9.767 millones en propiedades según las cuentas de 2018 de Pontegadea registradas a finales de julio, Ortega ya dispone de inmuebles por 10.700 millones.
Entre las transacciones cerradas este año se encuentra la segunda mayor adquisición realizada por Ortega, por 670 millones de euros, al hacerse con un complejo de edificios en Seattle (Estados Unidos) en el que Amazon tiene parte de sus oficinas centrales. En Chicago sumó a su cartera el hotel Eurostars Magnificent Mile por 65 millones y en la de esta semana desembolsó 207,7 millones por la sede del despacho Baker McKenzie en Washington. Unos días antes del cierre de 2018, también en la capital estadounidense, adquirió el edificio de oficinas The Investment Building, situado en el distrito financiero. El importe ascendió a 335 millones.
EE UU es ya, de hecho, el primer mercado para la inmobiliaria, por delante de España, donde sus posesiones superan los 2.000 millones a valor de mercado. Entre los inmuebles más emblemáticos en el país se encuentra Torre Picasso, en Azca, adquirida a FCC por 400 millones. También es el casero de Cepsa en Torre Foster, en el área de las Cuatro Torres de Madrid, por la que pagó 490 millones, y es propietario del edificio de Gran Vía 32 en Madrid, donde se ubica una flagship store de Primark.
En EE UU ha adquirido en los últimos tiempos los edificios de Seattle y Washington, además de en San Francisco y otro en Los Ángeles. En Nueva York dispone de tres inmuebles, oficinas en Boston y Chicago y al menos dos complejos grandes en Miami, ciudad en la que pagó más de 320 millones por toda una manzana en la peatonal Lincoln Road, una de las calles más icónicas de Miami Beach.
También dispone de activos en Montreal, Toronto, México, Roma, Lisboa, Seúl y Londres. En la capital británica se hizo con el edificio Adelphi por 600 millones de libras el pasado año (680 millones al cambio de entonces), su mayor compra. También es suya la sede de Río Tinto, en la exclusiva St James Square, además de Devonshire House, un gigantesco inmueble en Picadilly, o dos edificios en la comercial Oxford Street.
Al nivel de las grandes inmobiliarias Merlin y Colonial
El tamaño. La cifra de 11.000 millones de euros en cartera acerca a Pontegadea al liderato de las inmobiliarias españolas dedicadas al negocio patrimonialista, es decir, arrendar oficinas, hoteles o tiendas. Encabeza esa clasificación la socimi Merlin, que dispone de un patrimonio de 12.375 millones en España y Portugal. Le sigue Colonial, con 11.798 millones en oficinas en Madrid, Barcelona y París.
El equipo. Amancio Ortega es el presidente de Pontegadea y su esposa Flora Pérez, vicepresidenta primera. Como vicepresidente segundo confía en el directivo José Arnau. En la filial inmobiliaria, Roberto Cibeira ejerce como consejero delegado.
Cifras. El beneficio de Pontegadea Inversiones alcanzó el pasado año los 1.817 millones, fundamentalmente gracias a los dividendos de Inditex. La pata inmobiliaria únicamente aportó 39 millones en ganancias y 61 millones en ingresos, procedentes de los alquileres que pagan las empresas inquilinas.
Donaciones. En 2017 la Fundación Amancio Ortega donó 310 millones a la sanidad pública para la adquisición de equipos de diagnóstico.