Elecciones generales, en directo
Casado admite el mal resultado y culpa a la fragmentación de la derecha y la ley electoral
![](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/V6QRUNHMWNJYDN6FQSXPIWJF5Q.jpg?auth=ef99b034f84372739610bb85c1ce2126891dd6e25acb9db2a62d20167924c064&width=414)
Con ya cerca del 100% escrutado y tan solo los restos por determinar, el PSOE ha ganado las elecciones por primera vez en 11 años. Pedro Sánchez ha obtenido en torno a 122 escaños y le puede valer con formar una coalición de izquierdas o una de derechas para gobernar. El PP sufre un varapalo histórico y queda al borde del sorpasso Ciudadanos, mientras que Vox se queda en 24 diputados y Podemos, en 42.
La victoria de Sánchez parece en este punto del escrutinio que es a consta de la debacle del PP, que se queda por debajo de los 70 escaños (logra 66). El pacto de gobierno en Andalucía, junto a Ciudadanos y Vox, se queda en torno a los 145 parlamentarios. Los de Rivera obtienen 57 diputados y los de Abascal, 24. Podemos resiste mejor de lo esperado y obtiene 35 diputados.
"11 años sin que se escuchara que el Partido Socialista ha ganado las elecciones, lo hemos hecho, y con ello, ha ganado el futuro frente al pasado", ha comenzado en su discurso de la victoria Pedro Sánchez. "Se ha demostrado que España es una gran democracia, sólida y de calidad también hay que reivindicar la democracia, y sobre todo la defensa que ha hecho el conjunto del país de la democracia", ha continuado el socialista en referencia a la alta participación.
"Se trataba de ganar las elecciones y de gobernar, hemos ganado las elecciones y vamos a gobernar España, durante toda la campaña hemos dicho que los próximos objetivos del Partido Socialista eran avanzar contra la desigualdad que sufren muchas personas y avanzar en la convivencia, acabar con la crispación que ha estado presente en la política territorial en los últimos años" ha proseguido el líder socialista.
La política de pactos posterior depende, en buena parte, de un puñado de votos en Zaragoza. Unos pocos votos dirimen un escaño para Ciudadanos y PSOE. Este diputado le permitiría a Sánchez gobernar con Podemos y otros partidos minoritarios, pero sin los independentistas. Más asentado parece el escaño para el PSOE por Navarra, que llegó a estar en manos de Bildu y el del PP por Melilla, en manos de Ciudadanos Por Melilla durante buena parte del recuento.
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha afirmado que ha llamado ya al presidente del Gobierno. Le ha transmitido la necesidad de trabajar para un Gobierno de izquierdas. Ha situado primero al programa electoral como el primer elemento para negociar, sin mencionar si reclamará a Sánchez algún ministerio. Pese a ello ha tratado de hacer autocrítica, dado que han perdido buena parte de los escaños de hace 4 años, y lo ha atribuido a las disputas internas, mientras que se ha arrojado el éxito de para a la derecha y la extrema derecha.
La que parece por el momento una posibilidad remota es un Gobierno de coalición entre Ciudadanos y PSOE. "Sanchez e iglesias van a formar gobierno con los nacionalistas", ha subrayado el líder de la formación naranja. Al mismo tiempo ha celebrado su victoria sobre el resto de fuerzas de la derecha y se ha erigido como líder de la oposición: "Los lideres de la oposición van a ser los diputados de Ciudadanos.
Por el lado socialista, la alianza con Ciudadanos también parece inverosímil: durante el discurso de Pedro Sánchez, los gritos de "con Rivera no" de los presentes en Ferraz interrumpieron a Sánchez, a lo que el presidente socialista respondió: "Creo que ha quedado bastante claro". "No queremos la involución, no queremos la reacción, queremos un país que mire al futuro", ha proseguido Sánchez.
Tampoco parece posible un pacto de derechas. El líder del PP, Pablo Casado, ha reconocido que "el resultado ha sido muy malo". Con un tono conciliador, muy diferente al que mostró en la campaña, el líder popular ha felicitado y elogiado a Pedro Sánchez por ganar las elecciones.
Sánchez ha capitalizado la elevada participación registrada (nueve puntos más que en 2016) en las elecciones, tras una campaña marcada por la polarización y la irrupción de Vox, que ha dividido los votos entre los partidos de derechas. De hecho, el líder de esta formación, Javier Ortega Smith, ha culpado a la "veleta naranja que sopla según va el viento" (C's) y la "derechita cobarde que no sabe confrontar" (PP), porque han sido "incapaces de echar a la izquierda de la Moncloa". Aunque Ortega Smith tiene claro que los resultados son una victoria para su formación: "La resistencia ya está dentro del Congreso y no vamos a parar".
Cuando aún solo había sondeos sobre la mesa, José Manuel Villegas, secretario general de Ciudadanos, ha sido de los primeros en valorar la jornada electoral: "Con lo que tenemos hasta ahora, lo primero que queremos decir desde Cs es que tenemos una buena noticia. Es una buena noticia la gran participación que parecen que pautan los resultados provisionales". Por su parte, la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, también ha querido destacar la "altísima participación" electoral y ha augurado que "probablemente esta sea una buena noche" para su partido.
Las portavoces de Podemos e Izquierda, Unida Noelia Vera y Sira Rego, respectivamente, han celebrado la alta participación y no han querido entrar a valorar las encuestas. "Nos felicitamos como país por el nivel de participación: ha habido un enorme esfuerzo movilizador y es un síntoma de la salud democrática. Nos hace mejor país", ha puesto en valor por su parte la responsable federal de Acción Política y Conflictos de IU.