El consejo de Mercadona pone en marcha un comité de lucha contra la corrupción
La compañía reconoce que el año pasado despidió al equivalente del 2% de su plantilla
Mercadona asegura, en el primer estado de información no financiera que elabora para conocimiento de sus accionistas, que el consejo de administración de la compañía aprobó, en mayo del año pasado, un modelo de organización y gestión para la prevención de riesgos penales.
Según detalle el informe citado a partir de este modelo se ha creado un Programa de prevención de delitos “cuyo objetivo principal es prevenir, o en su caso mitigar la comisión de delitos por parte de los empleados y directivos cuando actúan en nombre de la compañía en el desempeño de sus actividades laborales”.
Explica que, derivado de la actuación de este nuevo programa, que incorpora incluso un Canal de Interno de Comunicación y Denuncia, durante el ejercicio 2018, “el Comité de Cumplimiento Normativo no ha detectado casos de corrupción, ni soborno, ni de discriminación o vulneración de los derechos humanos en su organización”.
La cadena de supermercados asegura en paralelo también que su modelo de negocio está basado en “verdades universales y paradigmas”. Y explica que es un marco de referencia que “ayuda a que todas las personas, motivadas por su propio impulso en obtener resultados excelentes, vayan en la misma dirección y permite decidir con agilidad cómo y cuándo se debe actuar ante una circunstancia determinada”.
En el informe aprobado junto a la memoria económica de la compañía, ocupa un lugar central el detalle de la relación con su plantilla de la que asegura que “comparte los valores del modelo de la empresa”. Y lo define como un equipo “que toma decisiones, que arriesga, que aprende de sus errores para incrementar su talento y que aprovecha al máximo sus habilidades para abordar con éxito las metas marcadas”. Pese a ello o por ello, la empresa detalla que el año pasado despidió al equivalente del 2% del total de su fuerza laboral con un reparto por género del 1,65% de la plantilla total de mujeres y del 2,4% de la plantilla de hombres. “Correspondiendo casi en su totalidad de la categoría de gerente”, subraya. ç
La cadena de supermercados cerró 2018 con una plantilla total de 85.500 trabajadores, de los cuales 54.457 son mujeres y 31.043 son hombres, después de haber generado en ese año 1.500 puestos de trabajo
La empresa en su memoria, tal y como adelantó Juan Roig en su rueda de prensa anual, detalla que el año pasado su beneficio neto ascendió a 592 millones de euros, que se destinaron en su mayor parte a engrosar las reservas de la sociedad. Aunque con cargo a esta partida se distribuyeron entre sus accionistas en concepto de dividendo un total de 122.2 millones de euros. Derivado del control del 50,6% que posee Juan Roig, recibió 61 millones de euros y su esposa, propietaria de un 27,71%, a través de Herrecha Inversiones, 24 millones.
Explica además que el sueldo de Roig como presidente y consejero delegado ascendió a 5,2 millones de euros y que la retribución a los miembros femeninos del consejo de administración, sus cuatro hijas y su esposa, ascendió a un total de 2,9 millones de euros, mientras que los miembros masculinos, su hermano Fernando Roig y el empresario andaluz Rafael Gómez se embolsaron 654.000 euros.