Letterone: “Asumimos el riesgo de que Dia puede entrar en concurso de acreedores”
Stephan DuCharme justifica el rechazo al plan de la cúpula y detalla las condiciones de su ampliación
La lucha por Dia afronta una fase decisiva. Por un lado, su principal accionista, el fondo Letterone, es contundente: no piensa inyectar más dinero hasta que no se haga con el control de la sociedad una vez triunfe su opa. Por el otro, los bancos pueden llevar a la empresa al concurso de acreedores en caso de que fracase la ampliación de capital a la que se comprometió la empresa en diciembre para que la banca refinanciase hasta 900 millones en deuda a corto plazo.
"La empresa está teóricamente en riesgo de entrar en concurso de acreedores. Es un riesgo que estamos dispuestos a asumir. Nuestra oferta no tiene ninguna otra condición de las que aparecen en la documentación pública", ha afirmado Stephan Ducharme, managing director de Letterone, a CincoDías.
"Letterone ha perdido una cantidad significativa con esta inversión. Podríamos habernos ido fácilmente, pero no lo hemos hecho. Queremos encontrar vías para ayudar a Dia, somos un inversor responsable, pero no vamos a invertir dinero sin un cambio en la gestión de Dia. Por eso el primer paso es completar la opa. No podemos arriesgarnos a inyectar 500 millones sin que esto suceda", ha explicado, justificando así la negativa del inversor a suscribir un préstamo participativo que saque a la compañía de causa de disolución, antes de completar la opa..
"Nuestra posición es clara: cambiar la gestión antes de la ampliación de capital. No es una cuestión de consejero delegado. La condición es que la opa se complete, y después hacer la ampliación de capital. Esa es la condición principal", ha señalado.
El plan del fondo es que primero triunfe la opa que han lanzado sobre Dia a 0,67 euros por acción, que está condicionada a que la empresa no emita nuevas acciones. Se compromete después a asegurar una ampliación de capital por hasta 500 millones. "Esta cantidad es el suelo y podemos negociar", ha apuntado DuCharme.
Esta ampliación está condicionada a alcanzar un acuerdo con la banca para refinanciar la deuda. Las líneas rojas de DuCharme en esta negociación son, en esencia, que las entidades les restituyan las líneas de liquidez con las que Dia contaba antes de octubre, cuando reformuló las cuentas de 2017 y revisó a la baja sus objetivos de beneficio. También que el importe de la ampliación sea dedicado íntegramente a financiar el plan de negocio y no a repagar deuda.
"Todas las líneas están abiertas, hemos presentado nuestras ideas a los bancos. Ahora es turno de los bancos discutirlo, nosotros estamos contentos de debatirlos. Pero es importante que la gente entienda que no es una condición para la opa", ha explicado. Las primeras exigencias de Letterone, como una carencia en el pago de la deuda, han sido rechazadas por la banca. Para el representante del fondo, "es normal que haya un proceso de discusiones, pero tengo confianza. El objetivo es rescatar Dia, creemos que lo que ponemos sobre la mesa es bastante justo, pero siempre hay debate. A veces las cosas llevan tiempo, dos semanas, dos meses.. Es normal. Pero confiamos en poder conseguirlo", ha señalado.
El responsable de L1Retail, el brazo de Letterone que en última instancia efectúa la opa, cree que los bancos deben preguntarse qué ampliación de capital y qué plan de negocio les garantiza que su deuda será devuelta. "Creemos que nuestro plan asegura rendimiento operacional, comercial y financiero", explica. "Esta es la mayor garantía que pueden tener los bancos. Dia tiene grandes oportunidades para mejorar las ventas, invertir en tiendas... Estamos hablando de abrir nuevas tiendas. Nuestros estudios nos dicen que podemos abrir cientos de ellas en España, pero eso no se hace de un día para otro. Es una estrategia de crecimiento".
DuCharme tampoco descarta un acuerdo con el consejo de administración de Dia, además de con la banca, antes de la junta de accionistas. "Nosotros tenemos abiertos todos los canales de comunicación con todo el mundo, no hay barreras, nos respetamos los unos a los otros. Si hay interés entre las partes, se puede llegar a un acuerdo. La prioridad es ir a la junta de accionistas y que estos puedan decidir", aunque defiende que su plan "es mejor" y "menos dilutivo" para los accionistas.