Alcoa estaría dispuesta a mantener plantas en condiciones de ser rearrancadas
El Gobierno ha pedido a la empresa seis meses más para negociar una solución al ERE que afecta a 686 trabajadores
Alcoa estaría dispuesta a mantener en condiciones las series de electrolisis de las factorías de Avilés (Asturias) y A Coruña para que se pudiera rearrancar la actividad en ellas si surge un inversor, siempre que los trabajadores, cuya participación es necesaria en el proceso, estén de acuerdo.
Fuentes de la empresa han indicado hoy a Efe que el mantenimiento de las instalaciones en condiciones óptimas para poder ser rearrancadas, en caso de que aparezca un inversor para esas plantas que Alcoa quiere cerrar, es una de las peticiones que le ha hecho el Gobierno durante la reunión mantenida ayer hasta altas horas de la noche.
Para poder mantener operativa la planta, Alcoa estaría dispuesta a llevar a cabo un apagado de las series de electrolisis de estas factorías de aluminio para que queden en condiciones óptimas para ser rearrancadas, pero para dichas operaciones se necesita la cooperación de los trabajadores, según han indicado las mismas fuentes.
Un apagado abrupto de las series de electrolisis haría que solidificaran las cubas y el metal se quedaría duro dentro, con lo cual no se podrían rearrancar.
No obstante, han insistido que para que el apagado sea controlado es necesario llegar a un acuerdo con los trabajadores, con cuyos representantes se reúne de nuevo esta tarde la dirección dentro del periodo de consultas sobre el expediente de regulación de empleo (ERE) extintivo que tiene planteado Alcoa para la totalidad de las plantillas de las dos fábricas, que emplean a 686 trabajadores.
El mantenimiento de las instalaciones para que puedan volver a ser operativas es algo que ya se hizo en la planta del fabricante de aerogeneradores Vestas en Villadangos del Páramo (León), aunque en el caso de las plantas de aluminio tiene una mayor complejidad.
Respecto a las peticiones del Gobierno de paralizar el ERE anunciado por Alcoa para esas dos factorías en octubre y alargar seis meses más las negociaciones, las mismas fuentes sólo han manifestado que en la reunión de ayer, en la que participaron representantes de la empresa, del Gobierno central, sindicatos y los consejeros de Industria de Asturias y Galicia se expusieron diferentes ideas y Alcoa las escuchó.
La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha anunciado hoy que el Gobierno había dado un ultimátum a la empresa, a la que acusa de bloquear la negociación para evitar el cierre de sus plantas en A Coruña (Galicia) y Avilés (Asturias), y le ha exigido paralizar el ERE y alagar seis meses más las negociaciones.
En una entrevista a la Cadena Ser, Maroto ha explicado que el martes se llegó a un "documento de mínimos" para continuar con las negociaciones que el Gobierno, la Xunta de Galicia y el Principado de Asturias mantienen con la multinacional, a la que piden paralizar el ERE, cuyo periodo de consultas finaliza el próximo 15 de enero.
Además, Maroto ha pedido a la empresa que se muestre abierta a aceptar más alternativas y ha puesto como ejemplo de solución la firma del proyecto de reindustrialización en Gádor (Almería), tras el cierre de Cemex en la zona, o la búsqueda de un socio para la planta de Vestas en León. Sin embargo, para ello, ha señalado que es "imprescindible" que exista voluntad empresarial.
Según han explicado a EFE fuentes cercanas a las conversaciones, en la situación actual se abre una nueva vía de trabajo con Alcoa orientada a retrasar la finalización del expediente de regulación de empleo que la compañía ha presentado para 686 trabajadores, mientras se busca, al mismo tiempo, una solución que garantice la viabilidad de ambas plantas.
En este sentido, las citadas fuentes han indicado que esta petición es el resultado del trabajo conjunto entre el Gobierno, los sindicatos y las administraciones implicadas, que ayer estuvieron reunidos en la sede del Ministerio con la empresa durante seis horas.
El pasado martes, un millar de trabajadores de estas plantas se movilizaron frente al Ministerio de Industria contra el cierre de estas plantas y, además, en la mañana del miércoles estaba prevista una reunión entre Alcoa y los sindicatos con motivo del expediente de extinción de empleo.
