El secretario del Tesoro desmiente que Trump quiera despedir al presidente de la Reserva Federal
El presidente de EE UU se habría planteado prescindir de Jerome Powell por subir los tipos, según Bloomberg.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steve Mnuchin, ha declarado este sábado que el presidente norteamericano, Donald Trump, le dijo que "nunca se había planteado" despedir al presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, desmintiendo varias informaciones publicadas en medios estadounidenses sobre un posible despido.
Mnuchin ha publicado en su cuenta oficial de Twitter que Trump le dijo que "él nunca había sugerido despedir" a Powell. Según el secretario del Tesoro, el presidente consideraba que no tenía la autoridad necesaria o el derecho de despedir al presidente de la Reserva Federal.
Este mismo sábado, varios medios de comunicación, en especial la agencia Bloomberg, han informado de que Trump llegó a discutir abiertamente la posibilidad de despedir al presidente de la Reserva Federal después de que éste anunciara una subida de los tipos de interés, según fuentes próximas a la cuestión.
Cualquier intento por parte de Trump de expulsar a Powell tendría efectos potencialmente devastadores en los mercados financieros, socavando la confianza de los inversores en la capacidad del banco central para guiar la economía estadounidense sin interferencia política.
La Ley de la Reserva Federal sí dice que los gobernadores pueden ser "destituidos por causa del presidente". Sus decisiones de personal se extienden a la FED, pero las reglas exactas sobre el despido son legalmente ambiguas.
Tal medida representaría un desafío sin precedentes para la independencia de la Reserva Federal. Aunque Powell fue nominado por el presidente, su designación parte de la idea de que la FED actúa con total independencia de la Casa Blanca. La separación entre el Gobierno y la política nacional monetaria es interpretada como un símbolo de confianza.
A la subida de los tipos -hasta un rango objetivo de entre el 2,25% y el 2,5%- se añade el tumultuoso derrotero de los mercados bursátiles, que han registrado su peor semana desde 2011, con un descenso en el índice S&P 500 del 7,1%. Trump ha atribuido gran parte de la culpa a la FED y llegó a decir en octubre que la reserva se "moría de ganas" por elevar los tipos.