Dia no convence al mercado y vuelve a hundirse un 25% en Bolsa

Las correcciones son por imputación en distintos ejercicios, no por "movimientos de caja" El beneficio de 2017 se reduce de 110 a 90 millones de euros

Supermercados Dia continúa poco a poco dando detalles de los reajustes de la contabilidad del ejercicio 2017, que la semana pasada le llevó a perder en dos días cerca de la mitad de su valor en Bolsa. La compañía ha emitido una nota en la CNMV en la que detalla que la revisión de las cifras tendrá un efecto en el beneficio del ejercicio 2017 por importe de 20 millones de euros (26 millones antes del efecto fiscal), con lo que pasará de 110 a 90 millones a cierre del ejercicio.

Según explica el actual equipo gestor de la cadena de supermercados, la diferencia corresponde, en su mayor parte, a  "sobreestimaciones" en los descuentos comerciales a percibir de proveedores. La compañía explica que "fueron objeto de registro en un periodo distinto al que les correspondía" y pero que en ningún caso ha habido "movimiento de caja".

Además, respecto a los 70 millones que anunció la semana pasada que restaría del patrimonio neto, el grupo ha concluido que tras tener en cuenta el efecto fiscal, la reducción será de 56 millones y será  atribuible "en su mayor parte al negocio en Iberia".

Tras abrir al alza, la acción se ha dado la vuelta y ha cerrado la sesión con una caída del 24.5%, con lo que su acción queda con un precio de 0,66 euros. En una semana, la acción ha pasado de costar 2 euros a situarse a 0,6 euros.

 Reformulación de cuentas

Según la normativa contable vigente, "una vez se finalice el proceso de validación y confirmación del citado importe", cuando se formulen la cuentas anuales del ejercicio 2018, la compañía "procederá a reexpresar las cifras de 2017, que se presentarán a efectos comparativos".

De los 56 millones que se restarán al patrimonio neto, 36 corresponden a reservas y otros 20 al beneficio neto.  Del efecto en reservas, un importe de 18 millones de euros (24 millones de euros antes del efecto fiscal) corresponden a facturas pendientes de recibir de proveedores. Los 18 millones restantes corresponden, básicamente, a "estimaciones de provisiones por diversos conceptos" que se arrastraban de un ejercicio a otro y que "no resultan significativas ni individualmente ni en su conjunto". La sociedad ha decidido registrar esas partidas "en el periodo adecuado correspondiente".

Las correcciones, señala Dia, son "todavía provisionales" y han tenido como objetivo "imputar a cada ejercicio los ingresos y gastos que les corresponden, pero en ningún caso han supuesto movimientos de caja".