Wall Street trepa sin mal de altura
Los récords de los índices no disuaden a los analistas, que siguen apostando por la Bolsa de EE UU de forma selectiva “El mercado estadounidense hace caso omiso a los riesgos”, explican en Robeco
En Wall Street no hay miedo a las alturas.La Bolsa estadounidense encadena máximo tras máximo y no hay atisbo alguno de corrección en el horizonte. Y es que el mercado vive un rally imparable desde los mínimos de marzo de 2009, meses después de la quiebra de Lehman Brothers en septiembre de 2008. El índice S&P 500 que sube un 14% en lo que va de año, se embolsa unas ganancias del 250% desde esos mínimos.
“Si vemos el gráfico del S&P500 con dividendos vemos que hace cinco años estaba atacando máximos históricos y a buen seguro que la mayoría de analistas e informes apostaban por fuertes correcciones del mercado tras llegar a niveles récord. Sin embargo desde entonces, el S&P500 ha doblado el precio para un inversor que se atreviese a comprar Bolsa americana y reinvirtiese los dividendos”, explica Miguel Paz, director de gestión de Unicorp Patrimonio (grupo Unicaja).
Lejos de recomendar mirar hacia otros mercados, los analistas siguen apostando por la Bolsa americana. En las últimas semanas son numerosos los informes de las casas de análisis que recomiendan Bolsa americana. Bajo el título Renta variable estadounidense: La fuerza le acompaña, Lukas Daalder, director de Robeco Investment Solutions, explica que esta tendencia alcista podría no terminar hasta que no se produzca algún “suceso disruptivo importante, aunque lo irónico es que, en caso de producirse tal corrección, el mercado más seguro en el que estar sería el estadounidense”.
Haciendo uso de la famosa frase de la saga de cine Star Wars, el gestor de la firma holandesa explica que esa “fuerza intensa nos parece una forma muy acertada de describir el repunte que protagoniza actualmente el mercado de valores”. “A pesar de todos los obstáculos que se van presentando en el camino, al cierre de cada mes vemos que ninguno de ellos ha logrado desbaratar esta tendencia al alza. ¿Septiembre es el mes más volátil? Ni caso. ¿Las conversaciones sobre el Brexit no avanzan? A quién le importa. ¿Corea del Norte, el país del pequeño hombre cohete? Una oportunidad de compra. ¿Falta de liderazgo político sólido en EE UU? No es un problema.” Y es que tal y como explica este gestor el mercado estadounidense “se ha mostrado más que dispuesto a hacer caso omiso de los riesgos y a seguir buscando razones para proseguir su ascenso”.
Excusas para la corrección
A pesar de ello, las fuertes plusvalías latentes que acumulan muchos valores de la Bolsa estadounidense pueden ser una buena razón para que haya una corrección en el corto plazo, tal y como recuerda Juan José Fernádez-Figares, director de análisis de Link Securities.
El analista explica que normalmente, “la Bolsa estadounidense corrige una vez al año pero sin embargo, desde 2009 solo ha corregido en dos ocasiones: en verano de 2015 y en enero de 2016. Se está esperando una corrección pero no se sabe cuándo va a ser”. Junto a las plusvalías latentes acumuladas, otra de las razones que puede hacer corregir a la Bolsa es el posible cambio en la presidencia de la Fed en 2018 ya que según explica Bankinter “la reciente dimisión de Stanley Fischer y el probable relevo de Janet Yellen como presidenta de la Fed en febrero -los dos mayores defensores de las políticas monetarias expansivas- pueden dar lugar a un consejo más hawkish, partidario de subidas de tipos más rápidas”.
Además, los inversores están pendientes de la reforma fiscal. Juan José Fernández-Figares, de Link Securities recuerda que “la reforma fiscal saldrá adelante porque el partido republicano no se puede permitir llegar a las elecciones midterm de 2018 sin haber aprobado uno de sus proyectos estrella a pesar de tener el control en el Congreso”.
Aun así, hay factores que justifican esta tendencia imparable de la Bolsa de EEUU. Bankinter recuerda que “la economía estadounidense parece estar creciendo a la velocidad perfecta:la expansión del PIB es suficiente para generar mejoras en los niveles de empleo y renta familiar, pero no demasiada rápida como para provocar un recalentamiento de la economía o una inflación elevada. La cuestión clave a determinar es si la economía americana seguirá ganando momentum en los próximos trimestres. En nuestra opinión, la actual fase expansiva tendrá continuidad, el crecimiento manendrá una velocidad de crucero similar a la actual”.
Ni siquiera el efecto de los huracanas ha tenido reflejo en los mercados ya que según explican los expertos, su impacto solo frenará de forma transitoria la aceleración del crecimiento en Estados Unidos.
Bankinter mantiene la estimación de crecimiento de beneficios para el ejercicio 2017 en el 2,1% –después de la revisión a alza de las cifras del segundo trimestre– y revisa ligeramente al alza las perspectivas en los próximos años, para los que estima un crecimiento del 2,3% en 2018 y un 2% en 2019.