SolarWatt lanza una batería inteligente para competir con Tesla
El dispositivo saldrá al mercado por un precio de 5.700 euros
La carrera por aprovechar fuentes de energía naturales como el sol o el viento, frente al petróleo o el carbón, tropieza una y otra vez con una misma piedra: cómo aprovechar el exceso de energía de los días soleados para tener electricidad en los nublados. Una carrera en la que no solo compiten las baterías más potentes, sino también las que mejor se adaptan a las necesidades de los consumidores. Y esa es la apuesta de SolarWatt –una compañía que comparte su accionista mayoritario con BMW–, que presentó este martes en Berlín la "primera batería" que se adapta a esas necesidades. Trata así de agitar una industria donde hasta ahora los pasos los ha marcado Estados Unidos. Y, más concretamente, Elon Musk desde Tesla.
A diferencia de los bólidos eléctricos de Musk o sus intentos por conquistar el espacio, el objetivo de SolarWatt está en el autoconsumo de energías renovables. Así, el Myreserve Matrix cuenta con un sistema de medición del voltaje consumido cada momento en un hogar. En menos de 0,7 segundos adapta la corriente eléctrica que suministra a la que requieren los habitantes de ese espacio. Una potencia que puede ser controlada por estos habitantes a través de una app desde su smartphone. "Es una revolución en el mercado global de almacenamiento de energía", asegura Detlev Neuhaus, consejero delegado de SolarWatt.
"No nos importa Tesla. Nos importa contribuir a la transición energética", continúa Neuhaus. El directivo presumió de que, frente a los "monstruos" patentados por Musk, la suya es la "primera modular". Unas superbaterías que no permiten adaptar su fuerte potencia (de más de 40 kW) a la necesidad del usuario en un momento determinado frente al prototipo alemán, según explicó la compañía.
El Matrix de SolarWatt se basa en la combinación de, al menos, tres elementos. Uno de ellos se trata de la batería en sí y los otros dos están dotados con el hardware y el software que aportan la "adaptabilidad" al dispositivo. Una "adaptabilidad" que se puede incrementar al añadir más elementos de este tipo a la batería hasta alcanzar un máximo de cinco. En el caso de requerir aún más almacenamiento, el sistema permite contar con más baterías a las que se pueden adaptar otros cinco módulos inteligentes más. Algo que les permite ofrecer desde 2,2 kW hasta los 2 MW. "Imaginamos a una pareja sin hijos que necesita solo dos módulos. Instalan uno más cuando tienen su primer hijo y otro al nacer el segundo", desgrana el modelo Andrea Gustch, director de innovación de SolarWatt.
Otro de los argumentos que, según esta compañía, les diferencia de sus competidores es la facilidad de instalación. Con un tamaño similar al de una caja de zapatos y un peso inferior a los 25 kilos, Gustch pone el acento en la reducción de los costes de transporte e instalación. Una instalación que se limita a colgar los componentes en la pared y enchufarlos entre sí. Esta facilidad en la instalación se traslada a la reparación. En el caso de que se estropee uno de los módulos, puede ser sustituido.
Neuhaus reconoció que la inseguridad legal que da un Donald Trump receloso de la energía verde ralentiza los planes de la compañía por explotar comercialmente su dispositivo en EE UU. Sin embargo, SolarWatt sí sacará al mercado europeo, también en España, esta batería en verano con un precio de salida entre los 5.700 y los 8.000 euros de acuerdo al número de módulos instalados.