Primer encuentro Obama-Trump para iniciar la sucesión
Trump asegura que está impaciente por trabajar con el presidente saliente
Entre el presidente saliente de Estados Unidos, Barack Obama, y el electo, Donald Trump, existe una conocida y vieja animadversión que ayer dejaron de lado en su primer encuentro. Ambos políticos se reunieron en la Casa Blanca para abordar el traspaso de poderes en un clima cordial. Trump mantuvo el perfil conciliador que ya mostró en su primer discurso como ganador de las elecciones.
Durante años, Donald Trump alimentó la teoría conspirativa que asegura que Barack Obama no nació en Estados Unidos. El magnate ha utilizado su poder para desprestigiar al primer presidente negro de EEUU. Tras su victoria, Trump ha rebajado su tono y abandonado el perfil histriónico. El presidente electo acudió ayer a la Casa Blanca para reunirse con Obama, a quien calificó como un “hombre muy bueno.
Trump aseguró ayer que está “impaciente” por trabajar con el mandatario del país, Barack Obama. “Estoy deseando trabajar con el presidente en el futuro, incluido para pedirle consejo”, afirmó Trump durante una breve comparecencia ante la prensa tras una reunión de una hora y media con Obama.
El encuentro, según dijo Trump, iba a durar solo unos 10 o 15 minutos y tenía como objetivo que los dos hombres se conocieran en persona después de una dura campaña electoral, en la que intercambiaron duras críticas y en la que el millonario llegó a culpar a Obama de “fundar” el Estado Islámico (EI). Todos esos reproches y acusaciones no salieron en la conversación.
El encuentro duró finalmente una hora y media debido a que los dos tenían mucho de que hablar y “podría haber llegado a ser mucho más largo”, según destacó Trump, quien asumirá el cargo el 20 de enero próximo.
“Ha sido un gran honor conocerle y será un honor estar con usted muchas más veces”, subrayó Trump, que aseguró sentir un “gran respeto” por Obama. La reunión representa el principio del traspaso de poderes entre Obama y Trump, quien ha prometido acabar con el legado del mandatario en inmigración, derogar su reforma sanitaria y romper el acuerdo nuclear logrado con Irán en julio de 2015. Este es el primer encuentro en persona entre Trump y Obama, aunque ya hablaron por teléfono en la madrugada del miércoles.
Obama confió en que su sucesor tenga “éxito” en su mandato por el bien del país, y en que ambos puedan trabajar juntos en los próximos dos meses de transición en “muchos de los temas” que interesan a los estadounidenses.
Durante el encuentro entre el presidente saliente y el electo, la primera dama, Michelle Obama, recibió en la residencia presidencial a su sucesora, Melania Trump, con quien también mantuvo “una excelente conversación”. “Queremos asegurarnos de que se sienten bienvenidos durante los preparativos para la transición”, subrayó Obama.
No obstante, la tensión entre Obama y Trump quedó patente en la sigilosa llegada del presidente electo y en el hecho de que no se haya difundido ninguna foto oficial entre la actual Administración y la próxima.
Tras su reunión con Obama, Trump mantuvo un encuentro con Jack Tyan, líder de la mayoría republicana en el Congreso, y tras esa reunión aseguró a los periodistas que sus primeras medidas actuaran sobre el sistema sanitario y sobre inmigración. "Como ustedes saben, vamos a bajar los impuestos, explicó. Vamos a hacer cosas espectaculares por el pueblo americano", concluyó.