¿Qué perfiles laborales buscan y no encuentran las empresas?
Robótica, ‘big data’ o biotecnología están entre las áreas más demandadas por las compañías.
Apenas el 7% de quienes estudian, a día de hoy, una carrera universitaria en España, están matriculados en las titulaciones relacionadas con las áreas laborales más requeridas por las empresas. Una brecha entre demanda y oferta que, durante los próximos 15 años, continuará creciendo.
Así lo refleja un estudio realizado por la compañía de servicios de recursos humanos Randstad, que explica cómo la robótica, la mecatrónica, que une mecánica, electrónica y programación, la biotecnología, el big data y el desarrollo de aplicaciones móviles son las especialidades que necesitan, y necesitarán, de un mayor número de profesionales cualificados. Algo que tiene su motivo en la cada vez mayor digitalización de los procesos en las empresas de todos los sectores, y por el desarrollo de una industria más automatizada.
Este último aspecto ha suscitado, a su vez, un debate sobre si el mayor peso de los robots repercutirá en una destrucción masiva de empleos. Según un estudio del Foro Económico Mundial, durante los próximos cinco años la automatización de las industrias se llevará consigo cinco millones de empleos en todo el mundo. Para Valentín Bote, director de Randstad Research, “lo que se produce es una transformación de los perfiles tecnológicos y no una destrucción de puestos”, lo que a su vez abre la puerta a nuevas oportunidades laborales.
Las cifras
15%es el crecimiento anual de la demanda en España de profesionales formados en ciencias, tecnología, ingenierías y matemáticas, según Randstad.
7%de los estudiantes que en la actualidad cursan titulaciones universitarias en España, están matriculados en las carreras relacionadas con las especialidades laborales más demandadas.
En cualquier caso, estas tienen difícil ser aprovechadas en España, según el estudio de Randstad. La demanda de perfiles relacionados con la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas crece en el país a un ritmo del 15% anual, más del doble de la proporción de quienes las estudian en la actualidad. “España tiene un problema peculiar, y es que surgen oportunidades laborales para determinados perfiles, pero una inmensa mayoría de los estudiantes están en otras disciplinas”, explica Bote. Esto, continúa el ejecutivo, tendrá consecuencias importantes. Por un lado, las industrias asentadas pueden llegar a recurrir a profesionales del extranjero para cubrir sus necesidades; y las nuevas, plantearse su marcha o ni siquiera instalarse en el país. “Ni fiscalmente, ni por conocimientos técnicos, ni de idiomas, estamos entre los más preparados para estas nuevas especialidades”, subraya Bote.
- Condiciones de trabajo
Pero la disparidad no solo reside en lo que piden las empresas y lo que encuentran en el mercado laboral. De forma habitual, el escaso talento disponible no se encuentra con ofertas laborales de calidad. “Entre el 50%y el 65% de las empresas que lamentan no encontrar profesionales adecuados, ofrecen condiciones por debajo del mercado”, revela Valentín Bote.
El estudio de Randstad detalla que países como EE UU, Canadá, Alemania o Japón necesitarán importar este tipo de talento en las próximas dos décadas, y por ello, están invirtiendo en mejorar su atractivo como empleadores. Y es que el salario es el factor más valorado por quienes sí encajan con los requisitos de las empresas, que no solo se reducen a lo técnico:“Cada vez más se requieren competencias actitudinales:interés en aprender, versatilidad, profesionales con actitud positiva... Tanto para técnicos como para directivos”, matiza Valentín Bote.