España esquiva el desplome de exportaciones en la zona euro
La zona euro exporta gran parte de sus bienes dentro de sus fronteras. Los últimos datos de la Comisión Europea revelan que el 63% de las exportaciones tienen como destino otro país de la misma región económica. Una endogamia que le permite vivir cómododamente cuando sus vecinos crecen y no depender de Asia y África, pero que le trae complicaciones cuando el motor del euro se gripa y los emergentes caen con fuerza.
Ese segundo escenario es el que ha producido en la actualidad, con emergentes como Brasil en caída libre o desarrollados como Rusia sufriendo el impacto de la caída del precio del petróleo. Todo ello ha llevado a que las exportaciones de la zona euro al resto del mundo hayan caído un 1% en el primer semestre del año, según el primer avance hecho público ayer por Eurostat, mientras que las dirigidas a países que comparten la moneda se hayan estancado.
Como consecuencia de todo ello, el desplome de las exportaciones en la zona euro ha sido generalizado. Se han producido caídas en cuatro de los cinco mayores exportadores de la zona euro. El único país que se salva es Alemania, con un avance del 1%, mientras que Francia retrocede un 1%, Italia se estanca y Holanda y Bélgica descienden un 3%. España, con 130.700 millones, es el país que más crece entre los grandes de la zona euro, con un 2%.
Especialmente significativo es el caso del Reino Unido, en el que las estadísticas reflejan que en el primer semestre las exportaciones se desploman un 11%, con caídas del 5% para los intercambios con países de la zona euro y del 18% para los que están fuera de esa región económica.
La estadística de la Comisión Europea refleja que las ventas de bienes de la zona euro han retrocedido entre los diez mayores clientes, con la excepción de Japón, donde suben un 3% entre enero y junio. En términos porcentuales, el mayor retroceso se ha producido en el caso de Corea del Sur, con un 12% menos, seguido por Suiza, con un 8%. En términos cuantitativos, la caída más importante corresponde a Suiza (5.900 millones menos), seguida por EE UU (4.000 millones menos) y Rusia (1.800 menos).
Las importaciones de bienes han retrocedido aún más que las exportaciones y eso ha provocado que el saldo comercial (diferencia entre compras y ventas) con los países fuera de la zona euro haya mejorado un 14,5% en la primera mitad del año, al pasar de un superávit de 25.500 a 29.200 millones de euros.