El ‘brexit’ hará que la libra vaya de mal en peor
Si Reino Unido saliera de la UE sería menos desastroso para las acciones y bonos británicos que para su ya castigada divisa.
El castigo a la libra esterlina no se detendrá. El nerviosismo sobre el referéndum acerca de la pertenencia de Reino Unido a la Unión Europea se ha reflejado más en la moneda del país que en el índice FTSE 100 o la deuda pública. Si la salida comienza a parecer más probable, la divergencia crecerá.
El valor real de la libra ha caído casi un 5% en lo que va de año. Sin embargo, otras inversiones relacionadas con Reino Unido no han sufrido por igual. Los precios de la deuda a diez años han aumentado más de un 5%, superando a sus homólogos alemanes, mientras que el FTSE 100 prácticamente no ha sufrido cambios. Esto podría sugerir que los inversores han tenido en cuenta que existe la posibilidad de una salida de la UE, por lo que en teoría la libra es ahora es menos vulnerable. Pero no es así.
El valor real de la divisa británica ha caído casi un 5% en lo que va de año, pero otras inversiones no han sufrido igual
En primer lugar, el rendimiento relativamente estable de las acciones y bonos británicos enmascara la ansiedad subyacente. Los precios de los derivados muestran la preferencia de los inversores por vender en lugar de por comprar en el FTSE 100.
En segundo lugar, si Reino Unido saliera de la UE, los gestores de activos todavía podrían mantener sus acciones y bonos británicos. Por ejemplo, una salida británica podría frenar las expectativas de inflación y llevar al gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, a recortar los tipos de interés. Esto ofrecería algo de apoyo a los bonos británicos. Además, una caída de la libra suavizaría el golpe a las acciones de las grandes empresas, ya que alrededor de tres cuartas partes de los ingresos de las firmas del FTSE 100 provienen del extranjero.
La decisión de aferrarse a los títulos y bonos británicos puede perjudicar aún más a la libra. Para los inversores extranjeros, una caída de la moneda británica podría acabar con las ganancias del mercado de acciones y bonos. Su exposición a las divisas estará por lo tanto asegurada, lo que pondrá aún más presión sobre la divisa británica. El brexit ya ha dado una paliza a la libra esterlina, pero aún faltan más golpes.