Los pisos turísticos retan a los hoteles en el Mobile
Airbnb alojará a 30.000 viajeros en Barcelona la semana que viene
La celebración en Barcelona del Mobile World Congress (MWC) se ha convertido en uno de los eventos del año para la ciudad por su capacidad de atracción a visitantes y de ingresos. La mayor cita de la industria tecnológica internacional atraerá a 95.000 personas en 2016, cifra similar a la del ejercicio anterior, en el que aportaron unos ingresos de 436 millones de euros y se crearon 12.675 contratos temporales, según datos del organizador.
El congreso, que se celebrará del 22 al 25 de febrero, cuelga año tras año el cartel de completo para una gran parte de los hoteles de la Ciudad Condal, pero en los últimos años también ha revolucionado el alquiler vacacional. Enrique Alcántara, presidente de Apartur, la asociación de apartamentos turísticos de Barcelona, afirma que el evento “permite a la ciudad desestacionalizar el turismo” y reconoce que la apuesta de las empresas por alquilar durante estos días un apartamento en vez de habitaciones de hotel “facilita la redistribución de la riqueza en la ciudad y que más de 3.000 pequeños propietarios se beneficien de ello”.
Barcelona cuenta con 9.600 pisos turísticos legales, que alojan a una media de unos 40.000 viajeros, a los que se suma una oferta ilegal de tamaño desconocido. Desde Apartur se prevé una ocupación de entre el 95% y el 100% para los pisos turísticos y la plataforma Airbnb, en la que se ofertan algunos de ellos, ha desvelado que cerca de 30.000 turistas se alojarán a través de ella en la ciudad la semana que viene. Es decir, un tercio del total de los visitantes del Mobile. Una cifra que se ha incrementado un 40% con respecto a 2015.
Airbnb acogerá además a más de 200 empresas que acudirán al congreso la semana que viene, compañías de las que por confidencialidad no hace público sus nombres, si bien entre los grupos que utilizan su servicio de viajes corporativo están Google, Facebook o Sixt Rental Car. La plataforma ha detectado además que este año se ha disparado en un 400% el número de asistentes que provienen de centros tecnológicos como Silicon Valley.
Otro de sus competidores en el alquiler vacacional, HomeAway, ha asegurado que los barrios más cercanos a la Fira –Les Corts y Sants-Montjuïc– son los que registran una mayor demanda, del 78% y 96%, respectivamente, mientras que el Eixample cuenta con una ocupación del 93%. Su director general para el sur de Europa, Juan Carlos Fernández, ha destacado que “para este tipo de eventos multitudinarios, el alquiler de casas para vacaciones se consolida como una opción”.
La fuerte ocupación de pisos turísticos durante el Mobile se compagina con el repunte hotelero. La organización de la feria, en colaboración con el Gremio de Hoteles de la ciudad, ha pactado bloquear unas 26.300 habitaciones para la semana que viene y desde Turismo de Barcelona se ha asegurado que los principales días del evento, el martes y el miércoles, habrá una plena ocupación de la planta hotelera de Barcelona. Una presencia que ya se empezará a notar durante el fin de semana.
Entre las cadenas hoteleras, Room Mate asegura que sus dos establecimientos en la ciudad estarán llenos durante estos días con unas tarifas de unos 300 euros la noche.
Los precios, según comentan hoteleros y asociaciones de pisos turísticos, se mantienen en el mismo nivel que el año pasado. Según Apartur “la tarifa media por noche de un apartamento para cuatro personas es de unos 200 euros, pero el precio varía mucho en función de la localización y de la cercanía a la feria”.
Tanto hoteleros como propietarios de pisos turísticos y plataformas están de acuerdo en que las reservas para estas fechas se producen con una gran antelación. Desde Room Mate destacan que sus habitaciones están acaparadas desde hace varios meses mientras que Enrique Alcántara, presidente de Apartur, afirma que “las empresas contratan los pisos de un año para otro”.
Por países de origen, la agencia de viajes online eDreams destaca un incremento de nueve puntos porcentuales, hasta el 74%, en las reservas de vuelos europeos, en especial desde París y Londres, mientras que los vuelos desde destinos nacionales han caído desde el 33% del año pasado al 25%.