La secretaria de Rato y su testaferro, en libertad
El juez de Instrucción 31 de Madrid, Antonio Serrano-Arnal, ha dejado en libertad a la secretaria del exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato, Teresa Arellano, y al supuesto testaferro del exministro, Miguel Ángel Montero, a los que mantiene imputados por delitos de blanqueo de capitales, corrupción de particulares y delito fiscal.
Los dos han abandonado los Juzgados de Plaza Castilla tras declarar por espacio de dos horas y media ante el magistrado, que ha ordenado que comparezcan una vez al mes en las dependencias judiciales y mantiene secreta esta parte del procedimiento relacionado con el supuesto pago de comisiones ilegales al expresidente de Bankia a cambio de contratos con la entidad.
Teresa Arellano y Miguel Ángel Montero habían sido detenidos ayer y se encontraban en dependencias de la Guardia Civil de Tres Cantos (Madrid). Hoy han sido trasladados al juzgado de Instrucción número 31 de Madrid, que lleva la investigación sobre las posibles actuaciones delictivas de Rodrigo Rato, han informado a Efe fuentes de la investigación. Los agentes responsables del arresto practicaron registros en los domicilios de los dos detenidos para recabar documentación.
Nueve imputados
Fuentes jurídicas han precisado que la causa afecta, por el momento, a nueve imputados. Además de Rato, Arellano y Montero, el juez atribuye los mismos tres delitos a otro de sus presuntos testaferros, Alberto Portuondo, --el único que ha sido enviado a prisión-- y al abogado Domingo Plaza.
Serrano-Arnal también mantiene la imputación sobre cuatro directivos de las empresas de publicidad Zenith Media y Publicis. Interrogó este jueves a la directora general de Zenith, Candi Rodríguez, y al consejero delegado de Publicis, Xabier Olazábal, así como a otros dos directivos de ambas sociedades, según ha informado El Español.
Según la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF), Rato empleó empresas pantalla para el cobro de comisiones por cerca de dos millones de euros de empresas proveedoras de Bankia. Más de 800.000 euros habrían ido a parar a Kradonara SL, propiedad del exvicepresidente, bajo la apariencia de pagos por servicios que realmente no se prestaron.
El expresidente de Bankia, Rodrigo Rato, acudió anoche a declarar ante la Comandancia de la Guardia Civil en el marco de la investigación sobre su patrimonio.
También ayer se conoció que el administrador de la empresa Albisa Inversiones, Alberto Portuondo, al que se le acusa de actuar como testaferro de Rato, declaró ante el juez que pagó 40.000 euros mensuales a la sociedad Kradonara, propiedad del también exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI).