Volkswagen enfrenta una dura crisis de liderazgo en su consejo
12 marcas mantiene ahora el grupo Volkswagen, cuatro de las cuales han sido absorbidas durante el mandato de Winterkorn
Los dos primeros ejecutivos de la primera automovilística europea, Volkswagen, enfrentados. Los duros comentarios del presidente de Volkswagen, Ferdinand Piech, sobre la gestión del consejero delegado, Martin Winterkorn, han desatado la frontal oposición del resto de responsables de las marcas bajo el paraguas Volkswagen, que se repliegan para respaldar al consejero y de otros aliados políticos y sindicales del consejero, bajo cuyo mando Volkswagen ha pasado de agrupar ocho marcas a 12.
El presidente de Vokswagen, que durante nueve años fue consejero delegado de la empresa, afirmó el pasado viernes en una entrevista con el periódico alemán Der Spiegel, que está “distanciado” de Winterkorn. Según este mismo diario, Winterkorn enfrenta ahora las críticas del consejo por ciertos escollos para los que Volkswagen no encuentra solución, como son la fallida estrategia de ventas en Estados Unidos, mercado donde no están consiguiendo una posición relevante, la caída de la rentabilidad de la marca y el escaso éxito desarrollando un nuevo modelo de bajo coste.
Sin embargo, fuentes de la compañía consultadas por Bloomberg revelaron que el consejero está listo “para pelear por su puesto”. Para los expertos, estas declaraciones de Piech socavaron las perspectivas de Winterkorn de renovar su contrato, que expira en diciembre del 2016. Pero no va a resultar tan fácil arrinconar a Winterkorn, que cuenta con fuertes aliados dentro del consejo de la compañía.
De hecho, ya el propio presidente de Porsche, Wolfgang Porsche, apoyó publicamente ayer al consejero en un comunicado. “Los comentarios del doctor Ferdinand Piech representan sólo su opinión personal”, señaló.
Pero además Winterkorn tiene dos potentes aliados en el consejo. Por un lado, cuenta con el apoyo del representante de los trabajadores y presidente del comité de empresa Bernd Osterloh, que ha respaldado publicamente al consejero frente al presidente. Los empleados mantiene la mitad de los 20 asientos en el consejo e históricamente han votado siempre en bloque para maximizar su poder representativo. El respaldo de los trabajadores fue crucial para que Piech echara al anterior consejero delegado, Bernd Pischetsrieder en 2006 y nombrara a Winterkorn.
También es relevante para determinar si el presidente está solo en sus críticas la posición del Estado de Baja Sajonia, sede del grupoVW. Los poderes públicos de la región tiene dos asientos. El ministro de Economía de la región, Olaf Lies, aseguró al diario Bild am Sonntag, que aprecia “mucho la labor del consejero delegado durante estos años”. El primer ministro del Estado de Baja Sajonia, Stephan Weil, aseguró sentirse “desagradablemente sorprendido” tras escuchar las críticas de Piech.
La familia Porsche tiene dos asientos en el consejo mientras que la familia Piech tiene tres. El Estado de Baja Sajonia tiene otros dos puestos, mientras que los representantes de los trabajadores controlan 10 sillas del consejo. Si los apoyos se mantuvieran tal y como se han manifestado públicamente hasta el momento, Winterkorn tendría el respaldo de 14 puestos del consejo, lo que complicaría mucho que el presidente consiguiera no renovarle el contrato en 2016.