La hostelería ya pacta subidas salariales superiores al 1% para este año
La economía española inició su particular camino por el desierto en el segundo trimestre de 2008. Tras quince años de crecimiento continuado, el PIB no creció entre abril y junio y ese fue el preludio de una crisis que ha durado seis años y que todavía no tiene fecha de caducidad. Los salarios, sin embargo, no se comportaron de la misma manera. En pleno desplome económico, las alzas salariales pactadas crecieron un 3,6% en 2008 (el PIB subió un 0,9%) y un 2,25% en 2009 (con una caída del PIB del 3,8%). En esos dos años, las empresas optaron por la destrucción de empleo como la vía más rápida para salvarse del cierre y fueron despedidos 1,7 millones de personas. En los tres años siguientes, los salarios crecieron con menos fuerza, pero en ningún caso menos del 1% y los despidos se elevaron a 1,3 millones. Fue en 2013 cuando los convenios empezaron a recoger una moderación salarial sin precedentes, que llevó a las remuneraciones a crecer una media del 0,5%.
Ahora la situación ha cambiado. La economía ha encadenado cuatro trimestres consecutivos de crecimiento y sindicatos y patronales están pactando incrementos salariales superiores a los registrados el pasado ejercicio.
El caso más ilustrativo es el de la hostelería, el sector que más puestos de trabajo está generando. En julio, la ocupación creció un 5,47% y se crearon 58.966 empleos. En los convenios registrados hasta junio, el incremento medio salarial pactado ha sido del 0,88%, por encima de la media del 0,55%. Los convenios que se están pactando en las últimas semanas, y que, por lo tanto, no están registrados todavía, recogen incrementos superiores. Es el caso del de Baleares, publicado el 31 de julio en el Boletín Oficial de Islas Baleares, que afecta a 125.000 trabajadores y refleja un alza del 4,5% entre 2014 y 2017 (1,12% anual).
“Mantener la congelación salarial en un contexto de elevado desempleo y degradación de los servicios públicos, cuando la patronal había facturado más de 10.500 millones de euros, con una rentabilidad en torno al 5% - 6% era percibido como una auténtica provocación”, apunta el secretario general de la Federación de Comercio, Hotelería y Turismo de CC OO, Gines Díaz. Desde las organizaciones sindicales se recuerda que el gran número de trabajadores afectados así como el hecho de que la autonomía sea la sede social de las principales cadenas hoteleras españolas (Barceló, Meliá, Iberostar o Riu) es muy importante al ser punto de referencia en la negociación de los convenios de otros territorios.
Así por ejemplo ha sucedido en Málaga, en el que el nuevo convenio, que afecta a otros 70.000 trabajadores, recoge una senda de incremento igual y el de Cataluña, pactado la primera semana de agosto, establece una senda de subidas a tres años, con incrementos del 0,6% para este año, del 0,8% para 2015 y del 0,9% para 2016. En los tres casos, los acuerdos se han rubricado tras unas negociaciones maratonianas y no exentas de dificultades por lo alejadas que estaban las posturas de sindicatos y empresarios. En Huelva se llegó a convocar siete días de huelga para la primera semana de agosto, en plena temporada alta, ante la última oferta de la patronal. Finalmente, el paro fue desconvocado y se alcanzó un acuerdo que fijaba congelación salarial para este año, una subida del 0,6% en 2015 y 2016, y 1,15% en 2017. El conflicto aún está sin resolver en Granada, donde los sindicatos todavía no han retirado la huelga anunciada para la primera semana de septiembre, en plena celebración del Mundial de Baloncesto.
Banca y construcción suben sueldos y destruyen empleo
La moderación salarial ha sido fundamental para que no se repitieran los errores cometidos en los primeros años de la crisis. Sin embargo, esos episodios están teniendo continuidad solo en algunos sectores específicos si se cruza la estadística mensual de afiliación a la Seguridad Social y la de los incrementos salariales pactados en convenio.
El sector que más puestos de trabajo ha destruido entre julio de 2013 y julio de 2014 ha sido el de actividades financieras y de seguros, con una caída del empleo del 3,83% o de 13.196 personas en términos absolutos. A ello ha contribuido la reforma del sector financiero y su brutal impacto en la red de sucursales de la banca. Según los datos que manejan las propias entidades, se han cerrado 13.000 oficinas bancarias en España, lo que equivale a la suma de la red de CaixaBank, Santander y BBVA.
Pese a esa fuerte destrucción de empleo, las alzas salariales pactadas en convenio hasta julio llegan al 1,07%, el doble de la media del resto de sectores.
Por su parte, la ocupación en la construcción ha caído en 10.679 personas entre julio de 2013 y julio de 2014 y sus convenios siguen reflejando alzas de salarios del 1,29%, casi el triple de la media.