El Ibex recupera los 10.300 y el euro sube con fuerza tras el inmovilismo del BCE
Las Bolsas esperaban con subidas la reunión mensual del BCE, ante la expectativa de posibles cambios en la política monetaria de la zona euro, y así han cerrado el día pesar de que Mario Draghi no ha anunciado novedades. El banco central mantiene los tipos de interés en el mínimo histórico del 0,25% y no adopta ninguna de las medidas expansivas que esperaban algunos analistas ante el bajo nivel de inflación. Las subidas bursátiles continuaron con cierto vigor durante la comparecencia del banco central pero se han moderado ligeramente en la parte final de la sesión tras conocerse un dato de pedidos de fábrica peor de lo esperado en Estados Unidos. El Ibex, que llegó a subir un 1,4%, anota su tercera sesión al alza y se revaloriza un 0,87 hasta los 10.304,00. El selectivo español ha regisrado el mejor comportamiento entre las principales Bolsas europeas.
De vuelta al Ibex, el selectivo parece decidido a dejar atrás los miedos provocados por las tensiones entre Ucrania y Rusia. Tras la fuerte caída del lunes, el índice avanza hoy por tercera sesión consecutiva y recupera los 10.300 puntos por primera vez desde enero. Todos los valores del selectivo, salvo Gamesa (-0,11%), han cerrado hoy en verde. Las mayores subidas han sido las de FCC (+4,21%), Gas Natural (+2,54%) y Ferrovial (+2,06%). .
Al buen momento de la deuda española, Daniel Pingarrón, estratega de mercados de IG Markets, añade otras razones que explican el mejor comportamiento actual del Ibex frente a otros índices europeos. "El hecho de que el selectivo español se hubiera quedado rezagado desde mediados de enero y un comportamiento ligeramente mejor del conjunto de los bluechips, también justifican que, en lo que llevamos de semana, el Ibex haya subido cerca de 300 puntos por encima del Dax", explica.En lo que va de año, el Ibex sube un 4%.
La reacción más directa a las palabras de Draghi se ha encontrado en el mercado de divisas. El euro ha subido hasta los 1,384 dólares tras conocer que el precio del dinero sigue en su mínimo histórico del 0,25%. La moneda común se ha apreciado hoy un 0,82%, su mayor subida diaria desde enero.
Ante la falta de cambios en su política monetaria, lo más relevante de la comparecencia de Draghi ha sido la actualización de perspectivas para los próximos años. El banquero central ha revisado al alza las previsiones de crecimiento para 2014 que pasa del 1,1% al 1,2% y las de 2015 (1,5%). Respecto a la inflación, además de señalar los efectos del precio de la energía en el IPC, el BCE ha revisado a la baja sus proyecciones (del 1,1% al 1%).
Draghi también se ha pronunciado hoy sobre el gran temor latente para los mercados, que sigue siendo la crisis ucraniana. El italiano ha indicado que “las interconexiones no son tan importantes como para sugerir un contagio grande de esta región, pero es una visión limitada de los acontecimientos, porque la situación geopolítico genera acontecimientos imprevisibles y de gran alcance”. Hoy se celebra una reunión extraordinaria de líderes europeos para abordar esta situación, el día que se ha conocido que Crimea celebrará un referéndum el próximo 16 de marzo sobre la adhesión a Rusia. De momento, los esfuerzos diplomáticos calman a los mercados.
En Estados Unidos, los inversores han tenido hoy una de cal y otra de arena. Las peticiones semanales de subsidio de desempleo bajaron en 26.000 personas la semana pasada y se situaron en 323.000. Es el nivel más bajo desde noviembre. En el lado negativo, los pedidos a fábrica en enero cayeron un 0,7%, peor de lo esperado. Con estos datos, los principales índices de Wall Street optan por las subidas inferiores al medio punto porcentual. Mañana se conocerá el dato de empleo en el mes de febrero, referencia clave tras unos datos algo más modestos en diciembre y enero justificados por el temporal que ha sacudido aquel país.
En el mercado secundario de deuda, el interés del bono a diez años repunta ligeramente hasta el 3,42%, en mínimos desde 2006, con la prima de riesgo en los 177 puntos básicos. La rentabilidad de la deuda española a una década vuelve a estar hoy algo por debajo de la italiana (3,46%). El bund alemán sube, pero menos que el español, hasta el 1,65%. El Tesoro público ha aprovechado este buen momento para la deuda española y ha colocado 5.000 millones de euros, el máximo previsto, en deuda a 3, 5 y 10 años a tipos más bajos que en la anterior ocasión. Además, en el caso de los bonos a 3 años ha reducido la rentabilidad a mínimos históricos, y en las obligaciones a 10 años ha llevado el interés a su menor nivel desde enero de 2006, antes de la crisis.