La banca periférica irrumpe en 2014 con emisiones por 10.300 millones
Las emisiones de deuda de la banca de la periferia europea se están convirtiendo en uno de los mejores termómetros de la progresiva vuelta a la normalidad en los mercados de capitales y del apetito arrollador de los inversores por activos de un riesgo relativo. De hecho, ya no se trata de entidades sometidas a la amenaza de una ruptura del euro y, por el contrario, han completado en su inmensa mayoría el proceso de recapitalización que les reclamaba el mercado.
A los emisores habituales en el inicio del ejercicio, cuando suele abrirse una ventana de emisiones aprovechando la toma de posiciones con que los gestores inauguran el año, se ha sumado en este 2014 un puñado de entidades que habían quedado fuera del mercado y que ahora recuperan el favor de los inversores. Así, se han estrenado BMN y Bankia con las primeras colocaciones de deuda después de ser nacionalizadas, si bien las emisiones bancarias se dan en el conjunto de países de la banca de la periferia europea.
Así, las entidades financieras de España, Italia, Portugal o Irlanda están aprovechando con más intensidad la demanda de activos con rentabilidad que caracteriza el arranque del ejercicio. En lo que va de año, ha captado en el mercado más de 10.000 millones de euros, de los que 2.500 millones correspondieron a colocaciones realizadas en la jornada de ayer.
Popular se sumó a la estela abierta por BMN y Bankia, y a la que se incorporaron también la semana pasada Santander y BBVA, y colocó ayer 500 millones de euros en deuda sénior a tres años, tras recibir una demanda por 1.200 millones que en un 73% procedió de inversores internacionales. La emisión se fijó con un diferencial de 190 puntos básicos sobre midswap, el índice de referencia de las emisiones a largo plazo, superior a los 155 en que colocó BBVA el jueves 1.000 millones a cinco años y por debajo de los 235 puntos básicos que pagó Bankia también por bonos sénior al mismo plazo que BBVA. La demanda recibida en la emisión de Popular fue también bastante inferior a la que registró Bankia en su colocación, de hasta 3.500 millones de euros, lo que sería síntoma de un ligero agotamiento en el actual rally de deuda, por el que la prima de riesgo ya volvió ayer a los 200 puntos básicos.
También aprovecharon ayer para emitir los italianos Intesa SanPaolo –750 millones de euros en bonos a ocho años, que se suman a los 1.838 millones captados el 7 de enero– y Banca Popolare di Vicenza –500 millones en bonos a tres años– y el portugués Espirito Santo, con 750 millones de euros a cinco años.
La semana pasada también emitieron deuda el portugués Caixa Geral –750 millones en obligaciones hipotecarias con demanda por 4.000– y Bank or Ireland, con 750 millones en sénior.