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Columna
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Bienvenida a la desinflación

El fantasma de la deflación mundial persigue a los bancos centrales. Las autoridades monetarias de Estados Unidos, la zona euro y otros países observan la caída de las tasas de inflación al 1%, o incluso un poco menos. Pero a pesar de que la deflación puede ser un riesgo en la deprimida zona euro, las políticas generales deben mantener la calma.

Durante la recesión, altos precios de las materias primas ayudaron a provocar debilidad deflacionaria. Las crisis de los precios de la energía y los alimentos golpearon a los consumidores, afectando el crecimiento en todo el mundo.

Puede que la carga se esté levantando. El índice Thomson Reuters / Jefferies CRB de materias primas se ha reducido en un 7% en el último año. Los precios del petróleo han disminuido recientemente, aunque el crudo Brent se mantiene en un nivel muy alto de 107 dólares por barril.

Mientras el PIB crezca –algo dudoso en la zona euro–, la deflación debería ser un fenómeno temporal

Mientras el crecimiento del PIB suba –un poco dudoso en la estancada zona euro– la deflación debería ser temporal. Los precios más bajos de las materias primas se alimentarán a través de una mayor confianza de los consumidores, unos salarios más altos, un mayor gasto, un crecimiento más rápido del PIB y, finalmente, una inflación en niveles más normales.

Desafortunadamente, una celebración de desinflación mundial todavía sería prematura. Los precios siguen aumentando a unas incómodas y altas tasas del 6 al 10% en países como Brasil, Rusia, India e Indonesia, y la política monetaria se ha tenido que ajustar. Pero incluso los bancos centrales de las economías emergentes, donde la inflación se encuentra inusualmente por debajo del 2% deben estar precavidos ante algo como un pánico deflacionario.

Ahora sería probable que el aumento de los estímulos monetarios hiciera subir el precio de las materias primas. Esto tendería a matar el crecimiento y –paradójicamente– a crear nuevos riesgos de deflación. La desinflación debería vigilarse con cuidado, pero en general tendría que ser bien recibida.

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