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Columna
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El dispendio de Vodafone

El dispendio de 7.000 millones de libras (unos 8.300 millones de euros) de Vodafone tiene sus límites. El segundo mayor operador de telefonía móvil del mundo está aumentando la inversión en redes de telecomunicaciones y en otros lugares. Eso es una buena preparación para la recuperación económica y el auge en el uso de datos. Pero la ruta más clara a un precio más alto de las acciones sigue siendo una potencial adquisición.

Los resultados de la primera mitad del ejercicio publicados ayer ponen de relieve las dificultades operativas de Vodafone, sobre todo en Europa, donde recesión, regulación y competencia todavía le dan problemas.

Respuesta de la dirección es el Project Spring, un gran aumento en los gastos de capital que se suma a los habituales 6.000 millones de libras al año que desembolsa Vodafone. Un total de 4.500 millones de libras se destinarán a redes móviles, en gran parte de Europa. Los restantes 2.500 millones de libras se dividen entre las inversiones de línea fija, corporativa y en inversiones minoristas. Sin embargo, las recompensas tardarán en llegar: el Ebitda adicional no superará al capital gastado durante siete años.

El aumento de la banda ancha rápida y móvil ha dado ventaja a los antiguos monopolios

Por otra parte, mientras que el cuadro normativo y económico se está iluminando, Vodafone está en una posición incómoda. El aumento de la banda ancha rápida y móvil ha dado ventaja a los antiguos monopolios de telecomunicaciones y compañías de cable, que agrupan sus servicios de móviles baratos con sus productos principales para comprar la lealtad de los clientes. Vodafone también ha dejado que se le escape la satisfacción del cliente y la calidad de la red en los mercados clave.

Así que Vodafone todavía parece vulnerable como para acercarse a AT&T, el gigante estadounidense. La nueva estrategia no se ve simplemente como una defensa contra el probable interés de oferta: tiene sentido en sus propios términos. Pero los accionistas podrían preferir tener una prima de adquisición convencional en cuestión de meses que esperar años a que Vodafone genere más valor.

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