Estas son las recetas de Arcano para afrontar un 2026 “con las valoraciones muy altas y mucha volatilidad”
La firma, que presta servicios que van desde la banca privada a la de inversión pasando por la gestión de activos, considera que el próximo ejercicio será bueno, pero lanza un aviso a navegantes: el punto de partida exige dosis adicionales de prudencia

El año que está a punto de finalizar se ha caracterizado por Bolsas en récord en todo el planeta, la Inteligencia Artificial como gran tótem, las tecnológicas en niveles nunca vistos, un dólar en retroceso arrastrado por un escenario de recorte de tipos en Estados Unidos, el bum –casi global– del sector inmobiliario y el oro marcando máximos. Ante este panorama, las previsiones de Arcano para 2026 son cautas. “Esperamos que sea un buen año, pero no exento de dificultades, con valoraciones muy altas y mucha volatilidad que nos va a complicar”, resume José Luis del Río, Co-CEO de la división de Gestión de Activos en un encuentro con periodistas celebrado el martes 16 de diciembre en Madrid.
El mantra de la inversión en los mercados privados para lograr rentabilidad sigue vigente. Y más que nunca: mejoran la rentabilidad y suponen menos volatilidad para una cartera a largo plazo. La misión es mantener la cabeza fría y no asumir más riesgo con la misión de elevar los rendimientos –esto, en el contexto actual, puede suponer un craso error–, con dos sectores como grandes pilares: las infraestructuras y el inmobiliario, explica Manuel Mendívil, CIO y Co-CEO de la división de Gestión de Activos de Alantra.
“La experiencia reciente demuestra que los periodos de exuberancia suelen ir seguidos de fases de ajuste, donde los activos menos líquidos y las estrategias más apalancadas pueden sufrir correcciones abruptas”, avisa Arcano en su informe de previsiones para 2026. Los activos privados son una oportunidad, pero siempre desde una aproximación selectiva y disciplinada.
Para que el plan salga bien, es necesario centrarse en los fundamentales, con compañías que gocen de una alta predictibilidad y generación de caja, donde poner en marcha distintas fórmulas de creación de valor para acelerar el crecimiento. Las mejoras operativas y la actividad de fusiones y adquisiciones (M&A) serán, a su juicio, grandes claves del capital privado. “Los gestores buscan subsectores fragmentados donde la consolidación y sinergias obtenidas pueden generar valor significativo en plazos cortos”, indican desde la firma.
El entorno de tipos de interés en proceso de normalización, pero todavía en niveles elevados, favorece a las estrategias de crédito privado y el préstamo directo (direct lending, en la jerga), que siguen ofreciendo primas atractivas frente al crédito tradicional. Sin embargo, la presión sobre los balances de empresas apalancadas y la posible rotación sectorial obligan a una monitorización constante de los riesgos.
Infraestructuras
Pierre Sáenz, socio responsable de Infraestructuras Sostenibles, explica que estas son un activo todoterreno: aguantan en todos los contextos, ya sean de elevada inflación o de recesión, como ocurrió en el Covid, y además cuentan con el apoyo del sector público para canalizar las ingentes necesidades de inversión para las que los estados carecen de recursos. “Tenemos ejemplos de muchos países que no invierten todo lo necesario en infraestructuras”, resume. El experto identifica tres megatendencias: la transición energética, la digitalización y la logística.
La transición energética será clave. Pese a que Trump ha limitado los incentivos fiscales a las renovables y ha sembrado el caos con los aranceles –que han elevado los costes de los componentes para la construcción de las instalaciones que generan la energía– el fuerte aumento de la demanda eléctrica impulsado por los centros de datos, que podrían aumentar el consumo energético hasta en un 25% para 2030 y un 78% para 2050, supone una oportunidad histórica de inversión en renovables. Pese a que la Casa Blanca teóricamente no es partidaria, las energías verdes se han demostrado como las más eficaces, pues son las más rápidas de desplegar. “Las turbinas para generar esa electricidad a través de centrales de gas tardan en llegar siete u ocho años. La opción más sencilla es construir un parque renovable, que en un año va a poder dar energía”, ejemplifica Pierre Sáenz.
En Europa, la situación es muy diferente, con un exceso coyuntural de generación, después de haberse instalado muchísimas renovables en el sistema y con una demanda que no ha tirado lo suficiente. A diferencia de Estados Unidos, los data centers aún no han llegado, y la electrificación no ha prendido con el ímpetu que se preveía. En el caso del Viejo Continente, las palabras mágicas son “almacenamiento” y “redes de distribución”.
Las infraestructuras digitales son otra de las claves para Arcano. El fuerte interés institucional, la expansión de la nube y el auge de la IA han generado una competencia intensa por activos de calidad, especialmente en centros de datos, torres y redes de fibra. Pero aquí es necesario ser muy vigilante. “Hay data centers con diferentes objetivos, y en Arcano apostamos por el cloud, es decir, la nube, porque es una necesidad de verdad. Y después todo lo que está relacionado con la IA de tipo generativo, pero no está dentro de nuestras opciones el training [entrenamiento]”, aclara.
Sáenz añade que el transporte sostenible y la logística son piezas clave en el funcionamiento de la economía tanto global como regional. El Covid fue el culpable de que las rutas se acortasen, y esta tendencia se ha agravado con los aranceles. “Ya no viene el supertanque repleto de containers de China, sino que viene de otros países por el Atlántico o desde Suramérica directamente a puertos del este de Estados Unidos”, agrega. Estos activos, que incluyen ferrocarriles, puertos o terminales logísticas, facilitan el comercio y la movilidad y suelen estar respaldados por concesiones a largo plazo o ingresos regulados.
Renta fija
La rebaja de los tipos de interés ha impulsado que el dinero se haya ido hacia títulos de mayor duración que cubren la inflación, pero sin rentabilidades reales. Así, en Arcano buscan high yield de mayor calidad, especialmente BB, híbridos corporativos, donde los emisores sólidos siguen ofreciendo diferenciales atractivos, pese a fundamentales resistentes, e instrumentos de tipo flotante (floating rate), que limitan la exposición a duración y capturan rendimientos elevados a corto plazo.
Crédito privado
“El crédito privado europeo deja de ser un nicho y pasa a ser en 2026 un pilar central en las carteras institucionales”, aseguran en Arcano. Aquí, tres áreas atraerán la atención: las transacciones directas en compañías propiedad de fundadores o familias, habitualmente con un apalancamiento más conservador, el crédito que demandan plataformas de specialty finance, desarrolladores de energía renovable, arrendadores de equipamiento y proveedores de capital circulante, y el crédito estructurado.
Inmuebles
Alejandro Adán, socio responsable de Real Estate de Arcano, destaca que “los precios residenciales están en niveles altísimos, con un crecimiento interanual en 2025 del 12% en España, prácticamente cinco veces la inflación”. Sin embargo, Adán considera que no existe una burbuja, sino que es la situación lógica cuando la demanda excede de largo la oferta disponible, principalmente por el aumento de la población, que sigue creciendo a un ritmo anual de medio millón de habitantes.
De cara al próximo año, los precios de la vivienda libre podrían seguir acumulando un incremento superior a la inflación, pero sin llegar a los niveles del presente ejercicio. ¿El motivo? La oferta nueva continuará con dificultades: permisos de obra moderados, costes elevados de construcción, escasez de suelo y retos burocráticos. Al mismo tiempo, en Arcano anticipan que la inversión en oficinas, retail, logístico, hotelero y vivienda flexible continuará siendo muy atractiva. En concreto, esperan una apreciación de entre el 10% y el 15% en activos como centros comerciales o logística y una revalorización significativa en oficinas prime.

