La UE rechaza la idea de Berlín y París de suavizar Basilea III
La banca sube en Bolsa tras reabrirse el debate de una moderación de los nuevos requerimientos de capital.
Los Gobiernos de Alemania y Francia han reabierto el debate sobre la necesidad de modular las nuevas exigencias de capital, recogidas en los acuerdos de Basilea III. A diferencia de lo propuesto por Berlín y París, la Comisión Europea se opone a dar facilidades a la banca para cumplir con los nuevos requerimientos en materia de solvencia.
El sector bancario europeo vivió ayer una jornada de subidas, tan solo con la posibilidad de poder contar con mayor plazo para cumplir con Basilea III. El segundo grupo bancario italiano, Unicredit, cerró con una subida del 10,44%, mientras que el segundo mayor banco francés, Société Générale, repuntó un 8,55%. El índice general del sector bancario europeo aumentó un 2,44%.
El diario Financial Times publicaba ayer que el ministro de Finanzas alemán Wolfgang Schäuble, y su homólogo francés, François Baroin, trabajan en un documento que reclama una revisión de algunos elementos clave de Basilea III. El argumento que se utiliza es que un excesivo rigor podría tener "efectos negativos" sobre el crecimiento.
Tras hacerse pública esta iniciativa, el comisario europeo de regulación financiera, Michel Barnier, defendía en Londres la aplicación de forma rigurosa de las nuevas reglas de capital. "Espero que la nueva propuesta sea más estricta, coherente y respetuosa con el espíritu de Basilea III", aseguró Barnier.
El borrador del mencionado documento pide un tratamiento que no penalice en exceso a los grupos financieros que cuenten con importantes filiales de seguros, lo que ocurre especialmente en la banca francesa. También se reclama un retraso de tres años en la exigencia del nuevo ratio de apalancamiento, una herramienta nueva para controlar los préstamos y riesgos asumidos por las entidades.
Estas demandas agradan al sector financiero, que había reclamado previamente la necesidad de atenuar las nuevas exigencias, pero también pueden provocar el enfado de los legisladores británicos, que han luchado para evitar nuevas modificaciones en los acuerdos de Basilea III. Desde Reino Unido se han lanzado contra París y Berlín por haber sido demasiado suaves con los bancos, frente al rigor de Londres.
El ministro de Finanzas alemán, Schäuble, negó la información de Financial Times, al asegurar que tanto Alemania como Francia cumplirán al pie de la letra los compromisos alcanzados en Basilea III.