Cuanto más, mejor
Planes de pensiones, de previsión asegurada, individuales, de ahorro sistemático... el abanico para cubrir la jubilación es cada vez más amplio
En estos tiempos de incertidumbre sobre el futuro del sistema público de pensiones es especialmente aconsejable cubrir la jubilación. Planes de pensiones, planes de previsión asegurados (PPA), planes individuales de ahorro sistemático (PIAS). Un abanico de productos para invertir, ahorrar y desgravar que permiten diseñar a medida un complemento de la pensión pública. Quedan pocos días para estudiar cuál es el más conveniente a cada situación personal si se quiere desgravar la inversión en la próxima declaración de la renta.
"La posibilidad de desgravar y las ventajas fiscales son los mayores atractivos de estos productos. Para invertir, prefiero los fondos de inversión porque hay más variedad y son más transparentes. La CNMV obliga a colgar en su web los informes trimestrales de cada fondo, con la rentabilidad y el detalle de su inversión", asegura Fernando Luque, analista jefe de Morning Star en España.
Los planes de pensiones se han convertido en el complemento por excelencia para la jubilación. Ángel Martínez-Aldama, director general de Inverco, suma otra ventaja a la de la desgravación. "En septiembre de este año, la rentabilidad media ponderada de los planes de pensiones ha sido del 4,66% anual en los últimos 20 años y del 2,98% anual en los últimos 15. La de los fondos de inversión ha sido un punto menor en ambos casos", indica.
Las ventajas de los planes de pensiones son muy desiguales para los inversores
El primer gasto al plantearse el retiro debería ser en un asesor fiscal
Quien tiene una renta modesta compra los planes de su banco o caja para protegerse en la vejez, y muchas veces desconoce que es un producto inversor con el que puede perder dinero. Con los planes de pensiones se invierte en renta mixta, fija o variable, y se puede cambiar de uno a otro si no da el beneficio esperado. ¿Se sabe lo que se compra? "Sus gastos de gestión son más elevados que los de los fondos de inversión, hay que informarse. Yo aconsejo acudir a alguien independiente que asesore sobre las necesidades del ahorrador y no sobre lo que una entidad necesita. Es importante saber que solo se puede cobrar a la edad de jubilación, por lo que hay que guardar el dinero del que se pueda prescindir hasta entonces e invertir solo lo que fiscalmente beneficie", explica Juan Luis García Alejo, director general de Inversis Gestión.
Las limitaciones de los planes de pensiones son similares para todos sus compradores, pero las ventajas resultan muy desiguales. No hay límite para invertir en un plan de pensiones, pero solo se podrá desgravar hasta 10.000 euros anuales o 12.500 euros si es mayor de 50 años. Sí sumará a esta desgravación la inversión realizada en los planes de pensiones del cónyuge y de los hijos deficientes, con distintas cuantías. Otra limitación: la aportación desgravable no podrá superar el 30% de los ingresos por salarios y actividades económicas de cada contribuyente y el 50% para mayores de 50 años.
La peor desigualdad es que la aportación anual al plan de pensiones desgrava al tipo de la renta del contribuyente, "por lo que las rentas altas son las mayores beneficiadas. De una aportación anual de 1.000 euros, quien tribute en la escala del 24% desgravará 240 euros y quien tribute al 45% desgravará 450 euros", explica José María Mollinedo, secretario general de Gestha, asociación de los técnicos de Hacienda. Es un producto que aumenta proporcionalmente la ventaja fiscal cuanto más ganas, y esos son los menos. "El 85% de los ciudadanos declaran menos de 30.000 euros anuales y solo se podrán desgravar hasta un 28% de su aportación a estos planes. Esta desigualdad en el trato se repite en el resto de los productos que desgravan. Es injusto", añade Mollinedo.
Quien quiera asegurar el dinero que recibirá al jubilarse podrá comprar un PPA. Son seguros de ahorro para la jubilación con rentabilidad asegurada y con igual tratamiento fiscal que los planes de pensiones. Las cuantías desgravables del PPA y del plan de pensiones deben sumarse, por lo que el límite de ambas es de 10.000 o de 12.500 euros. "Al comprar un plan de pensiones hay que preguntar sobre lo que está invertido para conocer el nivel de riesgo. Pero al contratar un PPA aseguramos la rentabilidad sobre el capital al plazo que el cliente desee. El dinero no se podrá cobrar antes de la jubilación, pero sí se podrá traspasar a un plan de pensiones si se prefiere aumentar la rentabilidad", explica José Antonio Iglesias, director de marketing de VidaCaixa Grupo.
El plan de pensiones y el PPA se pueden complementar con un PIAS. Saber que las aportaciones al PIAS no desgravan y que es recomendable contratarlo antes de los 55 años. "El PIAS es un seguro de ahorro que puede empezar a cobrarse a los 10 años del pago de la primera prima, se puede contratar a una rentabilidad fija o variable y su rendimiento tiene exención fiscal si se cobra como renta vitalicia. La principal ventaja del PIAS es que puede rescatarse en cualquier momento, aunque si es antes de los 10 años pierde las ventajas fiscales", cuenta Jesús Martínez Castellanos, director general de negocio de Mapfre Vida. No se puede contratar más de un PIAS por contribuyente y la cuantía máxima de todas sus aportaciones es de 240.000 euros. Su remuneración es similar a la de la renta fija.
Hay que hacer muchos números en una inversión que asegure la jubilación. Lo más complicado es el rescate. Durante la fase de la inversión y el ahorro no se tributa por el rendimiento, y la tributación viene de golpe al cobrar los productos. "Se tributa en función de la renta. Si estás jubilado, la cuantía será mucho menor, pero hay que estudiar si conviene capitalizar el rescate o diferirlo en el tiempo mediante rentas", explica Juan Manuel Moral, socio del área de fiscalidad de servicios financieros de KPMG. No siempre será posible hacer un gran viaje o comprarse un barco con los ahorros de toda la vida. "La tributación de los planes de pensiones es tan complicada al recibir las prestaciones que es necesario realizar un análisis muy detallado para reducir el pago", puntualiza Moral. Así las cosas, el primer gasto de la jubilación deberá ser en un asesor fiscal