Las plantillas de Iberia y de Express estarán totalmente separadas
Iberia Express será filial al 100% de Iberia, pero su estructura directiva y sus plantillas estarán completamente separadas para evitar la contaminación de estrategias y, sobre todo, de costes. La dirección de IAG no quiere que existan vasos comunicantes entre los tripulantes de ambas empresas, según confirmó el consejero delegado de Iberia, Rafael Sánchez Lozano.
La futura compañía de bajos costes para el corto y medio radio de Iberia tuvo muchas posibilidades de que su capital colgara directamente de IAG, aunque finalmente se ha preferido que sea una filial de la aerolínea española. La estrategia diseñada para Express, no obstante, está claramente enfocada a marcar la mayor distancia posible con su matriz, al menos en lo que afecta a las plantillas, las estructuras directivas y, sobre todo, los costes.
Rafael Sánchez Lozano, en una conversación con periodistas, quiso dejar muy claras las fronteras que existirán entre las dos marcas de Iberia. El consejero delegado enunció los principios sobre los que se construirá la nueva empresa. El primero, que Express tendrá una dirección distinta de la matriz para que pueda tomar las decisiones de manera autónoma en función de sus medios y de sus objetivos. La segunda que su plantilla, de unas 500 personas, será de nueva contratación y a costes de mercado. Tercero, que "inicialmente" el mantenimiento y el handling (servicios aeroportuarios) serán contratados con las divisiones de Iberia que prestan estos servicios, pero que, a partir de 2013, se optará por la mejor oferta.
Para que no quedara duda de su intención de evitar cualquier vaso comunicantes entre la plantilla y las estructuras de Iberia y de Express, Sánchez Lozano afirmó que cualquier trabajador de la matriz que quiera trabajar en la nueva aerolínea de bajos costes podrá hacerlo, pero tendrá que renunciar a sus derechos anteriores.
La radical separación entre las estructuras de Iberia y Express incide directamente en el debate que la dirección ha mantenido con el sindicato de pilotos. La propuesta de rebaja de costes que el Sepla ha aireado durante el último año con el objeto de que la operación de corto y medio radio se reestructurara con los medios propios de la aerolínea, y no fuera de ella, tenía como uno de los principales argumentos que los copilotos actuales de Iberia pasaran a ser los comandantes de la low cost. Como contrapartida (si hubiera llegado a producirse), el sindicato aceptaba que los nuevos copilotos fueran contratados con dos niveles salariales por debajo de los recogidos en el actual convenio. Estarían en línea con los que tienen los segundos de Easyjet en el momento de su incorporación a la compañía.
El escenario que se abre con el diseño de Express aprobado por IAG aprovecha la escasez actual de la plantilla de pilotos de Iberia y el calendario de jubilaciones que se prevé para los próximos años. La dirección de la aerolínea puede de esta manera comprometerse a no despedir a ningún piloto y a respetar "los términos y condiciones de los actuales empleados de Iberia".
Asamblea
Por otra parte, y en previsión de lo que finalmente a ocurrido, la creación de Iberia Express, la dirección del Sepla en Iberia ha convocado a sus afiliados a una asamblea "informativa" el próximo lunes para consensuar cual será la actitud que adoptará el colectivo en las próximas semanas.
El sindicato se plantea enfrentar la situación con movilizaciones laborales y abriendo un amplio frente judicial. El jefe del sindicato de pilotos en la compañía, Justo Peral, reiteró que la decisión de IAG de crear Iberia Express es ilegal al vulnerar el convenio de este colectivo.
Pese a ello, el sindicato de pilotos asegura que no tomará ninguna medida antes de reunirse con el resto de sindicatos de colectivos de vuelo de Iberia. Hace dos semanas el Sepla suscribió un pacto con otras organizaciones representativas de la compañía, Stavla, Sitcpla, CTA y USO, para actuar de manera conjunta.
Desmarque de UGT
El sindicato afirma que la creación de Express no afecta a las condiciones laborales de los trabajadores de Iberia. No se plantea ningún tipo de movilización o acción legal contra la filial y recuerda que los empleados de tierra y los TCP ya contemplaban en su convenio esta posibilidad.