Obama rinde homenaje a las víctimas del 11-S en la zona cero
Tres días después de la muerte de Osama bin Laden, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se reunió con los bomberos de la ciudad de Nueva York poco antes de visitar la zona cero (lugar dónde estaban situadas las dos torres del World Trade Center) para ofrecer consuelo a una ciudad en donde aún no han cicatrizado las heridas del 11-S.
Casi una década después de los atentados, Obama visitó en primer lugar el parque de bomberos 54 de Midtown Manhattan, en el que murieron 15 integrantes en los atentados, y posteriormente se desplazó a la zona cero donde depositó una corona de flores y se reunió con familiares de las víctimas.
Tras estrechar la mano de algunos bomberos, el presidente Obama señaló que solo había asistido para darles las gracias. "Este es un lugar simbólico del extraordinario sacrificio que se hizo en ese día terrible hace casi diez años", apuntó el presidente, que no obvió las referencias al líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, considerado el cerebro de los atentados del 11-S y abatido en una operación militar desarrollada en el norte de Pakistán. "La muerte de Bin Laden envía un mensaje a todo el mundo, pero también envía un mensaje aquí a casa, que cuando decimos que nunca olvidaremos, lo decimos de verdad. No importa quién estuviera al mando, solo queríamos asegurarnos que los que ejecutaron ese horrible acto, iban a ser ajusticiados", señaló.
Casi 3.000 personas murieron tras el secuestro de cuatro aviones por parte de integrantes de Al Qaeda. Dos de ellos se estrellaron contra las Torres Gemelas y otros dos en Washington y Pensilvania.
Los familiares de las víctimas y la Asociación Un Mañana Pacífico reclamaron ayer el cierre de Guantánamo y la retirada de las tropas de Irak y Afganistán.