El FMI augura a España seis años más con un déficit fiscal por encima del 3% que pide la UE
El FMI no confía en que el Gobierno español cumpla su promesa de rebajar el déficit fiscal hasta el 3% del PIB, el umbral que exige Bruselas para cumplir el Pacto de Estabilidad de la UE. En su Informe sobre Vigilancia Fiscal publicado ayer, el organismo internacional mejora las previsiones de déficit para este año, que estima en un 6,2% del PIB frente al 6,6% previsto en enero. Y, para 2012, augura un déficit del 5,6%, cuatro décimas menos que en su informe anterior. Sin embargo, a su juicio, España incumplirá el Pacto de Estabilidad hasta al menos 2016, último año sobre el que el FMI realiza proyecciones. Es más, el organismo internacional augura que el saldo fiscal negativo se mantendrá en el 4,6% en 2015 y 2016.
En cambio, el Gobierno se ha comprometido ante las autoridades europeas ha reducir sus números rojos al 3% del PIB en 2013 desde su nivel actual del 9,2%. El FMI alerta que para cumplir este objetivo resulta esencial realizar más ajustes. Por lo tanto, en los próximos ejercicios probablemente el Gobierno emprenderá nuevos recortes del gasto o subidas tributarias.
Con todo, el FMI destaca que España será, junto con Eslovaquia, la economía avanzada que más reducirá su saldo fiscal negativo este año. "Es algo muy positivo", declaró ayer Paolo Mauro, jefe de división del Departamento de Asuntos Fiscales del FMI. Además, destacó que la respuesta de las autoridades españolas para sanear sus cuentas ha sido "rotunda" y merece un "reconocimiento". En cualquier caso, evitó valorar las diferentes previsiones de déficit entre el FMI y el Gobierno Español.
Francia, Irlanda, Grecia y Portugal son otros de los países de la UE que tampoco lograrán rebajar su déficit al 3% en 2013. El Pacto de Estabilidad de la UE también exige que la deuda pública no supere el 60% del PIB, límite que España rebasó en una décima el año pasado. El FMI prevé que la deuda pública en España seguirá subiendo hasta alcanzar el 75,9% del PIB en 2016. En cualquier caso, se mantendrá por debajo de países como Francia, Italia, Bélgica o Portugal. De hecho, el FMI augura que la deuda pública en las economías desarrolladas superará el 100% del PIB este año.