Los muertos y desaparecidos son ya 10.000 en medio de la alarma mundial
El Brent baja un 4,5% por el descenso del consumo en Japón.
Las autoridades japonesas se están empleando a fondo para remover las ruinas y los escombros en las zonas afectadas por el terremoto y de llevar la ayuda a los damnificados en lugares aislados como Oshima, una pequeña isla frente a la costa de la provincia de Miyagi, donde fueron halladas ayer 1.300 personas con vida. Según las últimas cifras, los muertos y desaparecidos se elevan ya a 10.000, mientras que los rescatados son ya 25.000.
El gobernador de Miyagi, Yoshihiro Murai, aseguró que el principal problema es la falta de combustible en la zona y de material sanitario en los hospitales, que ya están racionando las medicinas. El primer ministro, Naoto Kan, ordenó a los soldados fijar como prioridad la asistencia a los damnificados. Más de medio millón de evacuados vive en 2.500 centros temporales de refugiados, en muchos de los cuales no hay agua potable ni electricidad.
La región más afectada por el terremoto representa el 6,2% del PIB y el 6,8% de la población del país. Pero un nuevo seísmo de 6,4 grados en la escala abierta de Richter sacudió ayer el suroeste de Tokio, con epicentro en la provincia de Shizuoka. El seísmo alcanzó una intensidad 6 en la escala japonesa de 7 y pudo sentirse en la capital japonesa con claridad.
El foco de mayor atención continuó ayer en la zona de Fukushima, tras la tercera explosión en cinco días en la central nuclear. El embajador español en Japón, Miguel Ángel Navarro, aseguró a la cadena Ser que no hay ningún español en 30 kilómetros a la redonda. La Embajada española en Tokio tiene registrados a un total de 1.969 residentes españoles en Japón, la mitad de ellos en Tokio, y ayer no había noticias de que ninguno de ellos haya resultado herido. Los niveles de radiación subieron ayer en varias localidades del país, incluida Tokio (hasta 20 veces por encima de lo normal). El Gobierno admitió fugas radiactivas que podrían afectar a la salud y recomendó a las personas que viven a menos de 30 kilómetros de la central que no salgan de sus casas. La alarma creció en Tokio y los ciudadanos hicieron acopio de agua, mascarillas y víveres.
Mientras, la Organización Mundial de la Salud sostiene que no hay riesgo para la salud si se mantiene evacuado el espacio comprendido en un radio de cinco kilómetros de la central. Japón ha ampliado la zona de evacuación hasta los 20 kilómetros.
El sistema de contención del reactor número 2 de Fukushima "ya no es estanco", declaró ayer en París el presidente de la Autoridad de la Seguridad Nuclear (ASN) de Francia, André-Claude Lacoste. Este situó el incidente en 6 sobre 7 en la escala internacional de peligrosidad, es decir, hay liberación considerable al exterior de materiales radiactivos.
La situación de Japón provocó una rebajada del precio del petróleo por las expectativas de un menor consumo en el país. El barril de Brent cayó a 108,52 dólares, un 4,5% menos que en la apertura. El impacto en términos de coste podría superar el 3% del PIB del país, unos 130.000 millones de euros). Según la OCDE, las consecuencias económicas de este desastre pueden ser "mucho peor" que las del seísmo de Kobe en 1995.
Las cifras
108,52 dólares fue el precio al que llegó el barril de Brent en Londres, un 4,5% menos que en la apertura.2.500 refugios temporales se han habilitado para damnificados. Muchos no tienen ni luz ni agua potable.25.000 personas han sido rescatadas. Hay 3.722 fallecidos oficiales y 6.258 desaparecidos.