La administración concursal de Marsans pide elevar el embargo de Díaz Ferrán y Pascual a 430 millones
La administración concursal de Viajes Marsans ha pedido que se eleve de 417 a 430 millones de euros el embargo decretado contra los antiguos propietarios de Viajes Marsans, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, así como contra la actual dueña, la sociedad Posibilitum Business, y se declare a todos ellos culpables de la quiebra de la compañía.
"Si hay un paradigma del concurso culpable ese es Viajes Marsans", afirmó el administrador concursal de la empresa Edorta Etxarandio, durante la vista de oposición a los embargos celebrada hoy en el Juzgado de lo Mercantil número 12 de Madrid.
Etxarandio concluyó que la causa de la insolvencia fue la mala gestión de Díaz Ferrán y Pascual durante los meses previos a la solicitud de concurso voluntario de junio de 2010, y les acusó de "culpa grave y dolo" por retrasar la petición de insolvencia.
El administrador comparó la situación de Viajes Marsans en junio de 2010 con "la muerte fulminante de un cetáceo, que aparece varado en los juzgados de lo mercantil". "Es imposible que nadie en el planeta le hubiera concedido un aval", añadió.
Al finalizar la vista, los propios Díaz Ferrán y Pascual calificaron de "falsa" la versión aportada por la administración concursal y, tal y cómo defendieron sus abogados, consideraron que la quiebra se produjo por la retirada de la licencia para vender billetes por parte de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), que tuvo lugar el 21 de abril de 2010.
"No quiero decir nada, confío en la Justicia", declaró Díaz Ferrán a la prensa. El antiguo presidente de la CEOE manifestó en los pasillos del juzgado que los proveedores comenzaron a reclamar los pagos cuando se hizo pública la retirada de la licencia y se cancelaron las reservas.
Contrariados por no declarar
Los antiguos propietarios del grupo Marsans se mostraron contrariados y se quejaron por no haber podido declarar ante la juez para relatar su versión. Ambos comparecían por primera vez antes un juzgado tras la quiebra de la compañía turísitca.
Esto se produjo porque, en las cuestiones previas, tanto el administrador concusal como la defensa de Posibilitum renunciaron a que fueran interrogados, a pesar de haberlo solicitado anteriormente y estar previsto en el orden del día.
El administrador pidió elevar los embargos decretados contra los antiguos y nuevos dueños de Marsans en 13 millones para cubrir el agujero patrimonial, tras reformular las cuentas de Viajes Marsans y sus filiales.
Por su parte, el abogado de Díaz Ferrán, Álvaro Garrido, solicitó el levantamiento del embargo de bienes y defendió que la deuda de 22 millones de euros contraída con la IATA "no suponía nada" para Viajes Marsans, ya que facturaba "entre 2 y 3 millones de euros" al día.
Asimismo, Garrido defendió que los antiguos propietarios de Viajes Marsans "cargaron personalmente con la situación de pánico" que provocó la retirada de la licencia entre los proveedores y defendió que solo transcurrió un mes y medio desde este hecho hasta la presentación del concurso de acreedores, el 9 de junio de 2010.
Por su parte, Pascual estuvo representado por los administradores concursales que tramitan su insolvencia personal, quienes no reclamaron el traslado de los embargos al Juzgado de lo Mercantil número 9 de Madrid, que traminta su concurso. La juez dictará en los próximos días su resolución.