El paro y la falta de crédito complica la compra de viviendas a travás de cooperativa
Los compradores de viviendas que se adhieren a una cooperativa buscan principalmente eliminar al intermediario más costoso, el promotor, lo que permite abaratar la compraventa hasta en un 20%. Pero en la coyuntura actual el desempleo y la falta de financiación están agravando los problemas de los cooperativistas, según un informe elaborado por Sala & Serra Abogado, que ha elaborado un decálogo de recomendaciones para futuros coooperativistas.
El comprador de vivienda, al adherirse a una cooperativa, busca eliminar al intermediario más costoso, el promotor, lo que en condiciones normales permite que el precio de una casa adquirida a través de una cooperativa puede rebajarse hasta en un 20%. No obstante, el desempleo y la falta de financiación agravan los problemas de los cooperativistas. Además, si surgen trabas la vivienda puede superar el precio de mercado, y el tiempo de espera para disfrutar del piso puede llegar a doce años, según un informe elaborado por Sala & Serra Abogados, que ha elaborado un decálogo de recomendaciones para futuros coooperativistas.
1. La cooperativa debe estar constituida ante notario e inscrita en el Registro de Cooperativas.
2. Se debe reclamar una copia de los estatutos sociales de la cooperativa e informarse sobre los derechos y obligaciones adquiridos al entrar a formar parte de ella, especialmente en lo que respecta a las condiciones que debemos cumplir para abandonarla.
3. Es imprescindible conocer si la cooperativa tiene o no terrenos en propiedad y si éstos son urbanos. El desarrollo de un terreno puede suponer una espera de entre 5 y 7 años, a los que hay que añadir dos años más, necesarios para la construcción del inmueble.
4. Hay que informarse sobre los compromisos de permanencia que adquirimos cuando firmamos el contrato de adhesión a la cooperativa.
5. Es preciso que, en el contrato de adhesión, aparezca un compromiso del plazo para la entrega de la vivienda y que queden reflejadas las consecuencias del incumplimiento de ese plazo.
6. Se debe realizar un examen de los compromisos adquiridos por la cooperativa con anterioridad a la adhesión de los socios. Puede ocurrir que, antes de iniciarse el proceso de captación de los cooperativistas, el Consejo Rector Constituyente, en ocasiones vinculado a la Gestora, haya firmado con ésta contratos de gestión a precios muy elevados o se ha comprometido a pagar importantes comisiones para la adquisición de terrenos. Todo esto hace que se incremente el precio final de las viviendas.
7. Cualquier aportación económica que se realice debe estar avalada por un banco o una compañía de seguros. Este aval o seguro es el único medio para garantizar la devolución de las cantidades y debe reunir los requisitos recogidos por la Ley 57/68.
8. Se debe conocer en qué supuestos podremos proceder a la ejecución del aval o seguro.
9. Es necesario estar informado sobre si existe o no un proyecto vinculado a la vivienda que se va a adquirir y obtener una copia de la memoria de calidades.
10. El contrato de adhesión que se firma cuando se entra a formar parte de la cooperativa debe estar vinculado a una determinada vivienda, debe ir acompañado de un plano del inmueble y en él se deben especificar el piso, la puerta, el número de portal...